Me preguntaron que por qué no acepté comisiones de terceros en mis mas de cuarenta años de vida Profesional y les hablé de ese olvidado concepto cual es la Fidelidad en su mas amplio sentido. Pero cuando mas se sorprendieron fue cuando les dije que todo aquél que me las ofrecía le advertía ante una sublime manifestación de sorpresa y extrañeza, por parte de los que las proponían, que nunca mas volvería a llamarle ni a contar con ellos, con cada uno, por el simple hecho de habérmela ofrecido. Cuando alguno de ellos me preguntó el porqué, le dije: “Por que si trabajas conmigo nunca podrán saber, mis propios compañeros o mi propio jefe o el mundo profesional que nos rodea, si yo soy del grupo de los que corrompes o de los que no”.
Ah, hablando de Fidelidad: ¡¡¡Feliz domingo!!!
Nota: Este cuento es imaginario y no se refiere a persona conocida alguna, han sido las teclas de mi ASUS 12 las que se han puesto de acuerdo, al parecer, para hacerlo ellas solas sin que en mi mediara intención alguna para ello.
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Vértigo me da la imagen, vergüenza los "aprovechaos".
ResponderEliminarLo de la imagen, Maria Luisa, tiene su sentido y será o es, como un deseo noi material, claro, y no con pingüinos, claro
EliminarQue sabio eres amigo......
ResponderEliminarSabio no, Argy, ya sabes aquello de que sabe mas el demonio por viejo .......
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