El espíritu de la Navidad, la sesera perdida y las puertas de la eternidad

23 diciembre 2012    

Es curioso que este año, por primera vez en mi vida, he comenzado a pensar que alguna de ellas será la última y eso no es, ni mucho menos, una renuncia a nada, ni tan solo un paso atrás, nada de eso. Hace unos años, un buen y joven amigo, contaba en su blog, que el mejor regalo de Navidad que iba a hacer a sus amigos ese año era el de pasar un rato con cada uno de ellos, si, un ratito de compañía: “En nochebuena voy para Alicante a pasar las fiestas, te invito a comer y así tu regalo seré yo”. A eso me he dedicado estos días y aunque no he podido con todos, me he acordado de mi joven amigo y de su extraordinario mensaje. Gracias David.

Últimamente me pasan cosas que, a veces, no me explico.  ¿Cómo iba yo a imaginar que mensajes tan sencillos me pudieran calar tan hondo? – Lo dicho, será el Espíritu de La Navidad que se ha impuesto a mi sesera y de lo cual, extrañamente e incluso, me alegro de que me afecte así. Nada es mejor ni peor de como lo quieras ver y yo aunque lo del cielo me resulte algo muy virtual, pienso que cada vez creo mas en La Navidad, ojalá durase siempre.

Feliz domingo de Navidad a todos los que lo sientan y a los que no, también, incluso para aquellos que no crean en la existencia de las puertas de la eternidad.

 

 

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