28 octubre 2013
Nada como un paseo por las tinieblas de lo urbano para darte cuenta que hay varios mundos, si, el de los que viven en la quinta avenida o en la más cecana calle Capitan Haya o en Bellvitge, por qué no? y luego, aunque no queramos verlo - ni solucionarlo - están LOS OTROS, los que viven en lugares como el que muestra la imagen. Un abuelo que estaba a mi lado en el momento de echar la foto y como si supiera lo que luego iba a escribir, me ha dicho: Nos quejamos por puro vicio ... ¿verdad?
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Tremendo documento gráfico. La verdad es que ese abuelo tiene toda la razón, a veces nos quejamos por quejarnos. Un saludo Enrique.
ResponderEliminarUn abrazo amigo Antonio M. Me alegra verte por aquí.
EliminarCreo que lo correcto sería prohibir que alguien pudiera vivir ahí, en el lomo de un barranco y junto a un CTE. Indignante.
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