Imagen: John Thomson (fotógrafo)
26 noviembre 2014
Permítaseme, hoy, una licencia sobre banalidades productivas … y el amor
Para aplicar el modelo alemán antes hay que enseñarse a producir, cosa que en este país aún nadie se atreve a decírselo a los sindicatos. Eso decía, esta madrugada, uno de los Sénecas de la barra del bar donde tomaba café.
Otro Séneca en la misma barra decía: Y cuánta razón tienes amigo, es lo mismo que enseñarle el NO a un niño y a los no tan niños. Si no lo haces cuando empiezan a crecer luego ya no hay quien los enderece.
Sabios comentarios, dice el Barista Jefe buscando mi aprobación y la de todos. Con un Viva España, que ha lanzado desde el fondo un Séneca en Barbecho, hemos decidido dejar por zanjado el asunto, lo cual es muy similar a lo que hacen nuestros políticos con ello.
Y todo este retrato, lo es para acabar derramando lágrimas cuando mi amigo el mourinista de Tarragona, que ya había tomado café y dos carajillos de anís, me dice que el seguidor de los equipos del Mourinho está mucho más contento al día siguiente del partido que durante el mismo. Juegan horroroso pero ganan.
Entonces es cuando se nos plantea el dilema:
¿Jugar mal, pero ganar e ir el primero, o jugar muy bien y ser segundo?
O lo que es lo mismo:
¿Hacer las cosas mal y vender o hacerlas muy bien y no vender?
¿Quién tiene la respuesta?. Yo tengo una, llevarla a cabo me costó, hace ya algunos años, y aunque fuera temporalmente, mi querido empleo. Hoy seguiría haciendo lo mismo, como en el amor, más vale poco pero bien, antes que mucho y mal.
enriquetarragófreixes
Soy de tu beta, por eso nos llevamos tan bien.
ResponderEliminarSerá, Tracy, será. Feliz noche.
EliminarDisculpa el eliminado, no venía a cuento.
ResponderEliminarSobre el asunto de los sindicatos, pues credibilidad cero mientras dependan orgánicamente de subvenciones estatales, y es que, por más huelgas que se monten, al final ningún dirigente morderá hasta el final la mano que le da de comer. Los sindicatos deben sustentarse de sus propios afiliados (como así deben hacerlo otras organizaciones, como la ICAR, sin ir más lejos)
Nuestro país, por otra parte, se parece muy poco al modelo alemán. Allí, a pesar de sus muchos problemas, se priman factores que se enraízan en la inteligencia de los que producen, aquí, se prima al envidioso y al trepa; aquí el espectáculo engrasa la máquina y el circo se extiende de manera transversal, mande quien mande. Y eso sí viene a cuento: las fuerzas conocidas ya nos tienen acostumbrados a las arcadas, y las fuerzas que pretenden salvar nuestra dignidad, al menos su dirigente, acaba de justificar a su novia cuando se la ha pillado concediendo un contrato, estando en un ayuntamiento, a su propio hermano. Por cierto, cuando una periodista le ha preguntado sobre el particular...la ha tratado de "machista". Como ves, miseria y compañía.
Un abrazo
Cierto, Valaf, lo que hay está mal, pero lo que viene ... peor, o eso parece. Apretémonos el cinturón y que sea lo que DQ
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