28 agosto 2019
Después de tres días sufriendo un fuerte ataque prostático, hoy ya he salido a la calle y comprando el pan, a la hora de pagar, saco 2,25 € y la guapa vendedora me dice sorprendida … “vaya, es usted adivino?” y yo le he dicho … “No, no lo soy, es que están los precios de la espelta y el multicereales en la pared” … se ha reído, claro, y he apostillado… “Es que tengo una vejez que no me la merezco”.
Ya me lo decía mi Padre … “Puede que la vida acabe resultando divertida, hijo, pero lo más importante es que te lo parezca”
