Ellos siguen ahí

13 agosto 2008:  

• Benito sigue despertando en mi aquella vieja sensación de encontrarse ante el padre de toda la vida, ante esa persona entusiasta y buena, segura y firme, ante ese duro profesor y/o amigo que no esconde las verdades ni magnífica lo voluble. Es un personaje que, celosamente, guarda y/o esconde su verdadera sensibilidad detrás de un imaginario burka que lo hace todavía mas admirable. Le contaba hoy que me emociené viendo los videos de "sus ascensos" como entrenador de ese fútbol que todos añoramos por muerto, por insulso, por previsible y por estar dimensionalmente distorsionado, donde los valores que se "priman" nada tienen que ver con aquellos que aprendimos, y vivimos, en los dichosos años del tercer cuarto del siglo pasado. Valores como el de la la dedicación, el esfuerzo, el compañerismo, respeto al contrario, deseo de competir, la generosidad y hasta la fidelidad, son valores que han sido olvidados por una generación que suspira por lo vanal, por lo aparente, por el ego y, fundamentalmente, por "la plata" y por el consumismo material y de ídolos que necesariamente forma parte de esa estúpida forma de ver la vida en la que vive destrozando su cuerpo y su alma nuestras nuevas, y no tan nuevas, generaciones.

• Me gustaría que todos todos aquellos logros que Benito consiguió con su admirable forma de ser, y todos aquellos valores que Benito representa para mi, y para muchos, pudieran trasladarse al papel, o al teclado de un coqueto pc como el que Él tiene, para que nuestra historia deportiva, y nuestro inmaduro plantel, pudieran disfrutarlo y emocionarse, como a mi me sucede cada vez que veo los videos de los ascensos de los equipos de Benito de los 70. Benito: por favor, si te decides a hacerlo, muchos te lo agradeceremos, aunque hoy aún no lo sepan.

• Y de Ramón que os voy a contar. Aparejador y empresario de élite antes que futbolista. Ese loco enamorado del balón, está muy desanimado con la forma en que se mueve el entorno del fútbol de hoy. ¿te acuerdas Ramón cuando poníamos grasa de caballo a las botas? ¿y de cuando le quitábamos los clavos que sobresalían de los tacos de madera? Pero lo mejor era cuando le dabas un cabezazo al balón y te dejaba la marca de los cordones del "matollo" en la frente. ¡Que golazo! Pero que marca me ha dejado el molt cabronet.

• No veis a Fran, porque está de vacaciones y absolutamente desconectado. El mundo inmobiliario, su último amor, le tiene absolutamente absorto, no tanto como su santa Carmen, ante la cual babosea aunque él no se de cuenta, pero le obliga a posponer esa deseable "prejubilación" que persigue. Es tan valiente y obstinado que lo está consiguiendo gracias a esa personalidad lleidatana que le caracteriza. Voluntad y entrega. A seguir en esa línea y, además, este año tu "BarÇa" tiene buen color. El mejor fichaje el Eto´o, ya ves. Ánimo y a seguir empujando, tienes que seguir cotizando para que puedan cobrar los jubilados.

• Ánimo amics, aquí seguiremos mientras nos dejen.

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