08 julio 2011 - 09 julio 2016
Es cierto, pasas por allí y sin querer es como si pasaras por la casa de algún familiar al que hace ya mucho tiempo que no ves. Echar la vista atrás no es malo, ni siquiera es bueno, ni, tampoco, es inútil, pero si lo que ves te gusta es algo mucho más que eso, es algo que no sabes expresar. Volver a la calle donde nací, a la de la primera casa que viví cuando me casé, o a cualquier otro de esos lugares en los que has dejado una parte de tu vida aunque solo haya un trocito, a veces, me resulta tremendamente agradable.
Ayer pasé por la Gran Vía, Parque Avenidas, y una especie de agradable escalofrío recorrió mi espalda. Tuve la suerte de que un semáforo amigo se puso rojo y pude mirar sin riesgo, luego aparqué, sin apearme, en la misma Rotonda, frente al Asiático. Una rápida y feliz película de esos 2001/2006 pasó por mi imaginaria pantalla. Los pude ver a todos, a casi todos, me sentó bien, yo fui muy feliz en esos años con ellos y con esa dedicación.
Siempre que paso por alguna Casa en la que yo haya intervenido, bien de Constructor o bien de Promotor, me paro siempre que puedo, es como si estuviera viendo a un hijo o a un amigo querido al que has abandonado a su suerte al llegar a su mayoría de edad. Es lo que tiene encariñarse con tu trabajo pues éste, el trabajo, es siempre muy agradecido, cuanto mas le das, mas te devuelve y no hablo de dinero, qué tampoco se desprecia, hablo de la felicidad que da haberlo disfrutado. Por eso, a veces, no puedo entender que la gente se aburra tanto, mirando el reloj, remoloneando para volver a empezar tras el bocadillo o haciendo cara de conmigo no va, como si de un maduro cajero de banca o de un antiguo portero de ambulatorio de la SS se tratara. Quizás una de las mayores desdichas de la gente es tener un empleo, algunos toda la vida, y no haber trabajado nunca, qué pena, ¿verdad? Mi Padre me decía: “Si has de ir a trabajar y no tienes mas remedio que hacerlo, pues procura disfrutarlo, si no te gusta el que te dan, búscate otro, pero no te aburras, ni te destruyas con él”, y yo nunca he entendido otra cosa.
Sí, año y medio sin hacerlo pero cobrando al mes lo que los "mileuristas" (pronto no tendremos que entrecomillar, he leído que la RAE va a aceptar la palabra), tardarían 6 y pico veces más y partiéndose el lomo. Y encima de nuestro dinero. ETF: cada día da todo más asco.
ResponderEliminarCada vez que leo en la prensa una noticia importante, me digo: seguro que Enrique hace un elegante y certero análisis de ésto.
ResponderEliminarEKK, eres muy amable conmigo, como siempre. Ayer noche "recriminaba" a uno de esos jóvenes blogueros que sigo apasionadamente por su capacidad de denuncia, que estaba bien lo que decía, pero encontraba a faltar un discurso con propuestas, con soluciones a lo que denunciaba.
ResponderEliminarEs cierto, EKK, da asco, hay mucha gente desmotivada y que aunque trabaja y cobra, lo hace sin ilusión alguna y de eso no siempre tienen ellos la culpa. Encuentro e faltar a empresarios que lo sean de verdad y a profesionales preparados, bien preparados, que quieran dedicarse a lo que se les contrata, que estén dispuestos a empezar de pinche y que antepongan la eficacia antes que a la queja de medios o de sueldo, quiero decir que lo hagan por ese orden y no al revés. Los empresarios creen que para serlo es suficiente ser accionista. Qué error, yo puedo tener una empresa de productos farmacéuticos y ser electricista, por ejemplo. Bastará que sepa contratar a los mejores profesionales para que me la gestionen y eso es algo que no se hace con frecuencia y, especialmente, por estos lares. Aquí los conocimientos, la mayoría de las veces, se adquiere por contagio y las mejores operaciones en El Dársena, en La Quintería o en las Casas de lucecitas de la Vega Baja.
Como diría Areces, la solución al mundo profesional de hoy se resume en tres: Formación, formación y formación y yo, amigo, EKK, sigo creyendo que aún estamos a tiempo, que ya no podemos esperar más, pero hay que hacer algo, un 40% de clase juvenil en el paro y que un 18% de nuestros estudiantes en edad de asumir la selectividad no son válidos ni para estudiar ni para trabajar. Alguien tendrá que hacer algo, ¿verdad? - Bueno, perdóname pero como me he disparado por culpa de mi noche toledana de Conferencia y charla, me he alargado mucho pero como aquí queda muy escondido lo voy a pasar a una nueva Bloguería.
Gracias, otra vez por andar por aquí, EKK
Realmente me he pasado de listo y he creido adivinar que tu artículo y su titular, estaba dirigido a alguien en particular...Solo hay que leer el periódico, creo que el del jueves para encontrar un caso como el del titular de esta entrada, a eso creía que te referías. Aunque por supuesto, el resto es totalmente válido.
ResponderEliminarNo te equivocas , EKK, ya sabes que el regate es una habilidad propia de viejos. Un abrazo-e.
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