Teatro Político: Cabro……zo, es como llamarte HP en Málaga

17 septiembre 2011

Pero como te atreves a decir en tu blog que tiene que venir un gobierno con mano dura para resolver el futuro ¿? Así me despachaban ayer tarde, antes de mi conferencia nocturna, todos mis amigachos de tertulia corta de media tarde de los viernes.  Una hora intensa pero necesaria, todos dicen lo que les parece y hasta dicen lo que no saben o de lo que yo no entiendo pues la mayoría se dedican a la política y eso ya, por si solo, es una carga que estigmatiza el habla de cualquiera que lo sea. Es curioso, además, que por muy amigos que sean, te hablan como si te fueran a pegar, ya sabéis, alzan la voz, se ponen de pié y mucho dedo apuntándote: “¿Qué quieres, que vuelva Franco?, eso es lo que os gustaría todos los que habláis así”, si, eso me dijeron y cuando ya llegas a estos extremos podrías hasta decirle algo que te dejaría tocado para toda la noche y para algunos días, pero NO, yo me río, mejor dicho: Sonrío y hago gestos con la de pensar, esto les desquicia a´´un más. Otro de mi lado, que no se pudo aguantar, soltó la frase de la tarde; “Vais a tener suerte, ahora va a ganar el flojo de Rajoy, (silbidos), SI, os va a vapulear, pero este país no se arregla hasta que llegue la Espe al poder” – La que se armó, como siempre, no fue pequeña, mi vecino de mesa parecía que le iba a dar un infarto, rojo como un tomate y sin voz para chillar mas que ellos, pero al rato, ya en el bar de la esquina, en la Rambla, todos bromeaban y el que te había dicho que eras un cab……zo, tan solo hacía unos minutos atrás, ahora te hablaba de lo mal que juega el Madrid y, por contra, lo fácil que golea, te ponía el brazo sobre el hombro y prometía comer un arroz esta semana próxima en el Ros, si encontraba un hueco en la agenda. 

“Llama a mi Secretaria y quedas con ella para comer conmigo, Enrique”, así me despedía mi incombustible, voraz y hasta feroz amigo, gran político, mas que amigo, pero me deja, (me dejan), siempre helado el corazón, para ellos todo lo que hacen es como un gran teatro y llega un momento en que no se dan cuenta que ya no están en el escenario de las iras políticas, no saben desconectar o es que su realidad está tan deformada que ya no saben distinguir la realidad, la real, de la otra,  de la ficción parlamentaria, si, eso será. Me asustan, pero cada vez menos, será que me pasa como a ellos, me voy acostumbrando tanto al teatro que ...

Sed felices y pasarlo, a veces cuela y la gente se contagia.

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