viernes, 20 de enero de 2012

“¿Pero vosotros de que coño os quejáis?”



20 enero 2012


La gente de la calle se toma las cosas de una manera tan divertida como aparente y acongojantemente tranquila. Si, hablo de la crisis, esa que motiva esos chistes tan habilidosos que para los de la raza hispana es como hacer caja para un político, así de fácil y así de terrible. En la cola del Corty, para pagar, había un hombre grande. altísimo y andaluz pero del Señorío Jerezano, o algo así, tenía gracia a espuertas y la repartía sin parar cada vez que habría la boca, así que yo, contagiado de tanta guasa, me decido a hacer la mía cuando veo que el sesudo empleado de el Corty se dedica con un empeño nipón a quitarle chapa esa que hace tit, tit, cuando pasas por las barreras electrónicas que ponen en las puertas de acceso y que cuando se les olvida quitarlas y te toca a ti, te dan ganas de renegar de esa pose tan progre que habilitas en las tertulias cultas de la progresía azafrán, del NO A LA PENA DE MUERTE. Vaya, me he perdido, ah, sí, decía que voy yo y cuando veo que está quitando la chapa del tit-tit, les digo: “¿Mira que si la chapa se la pusieran a los políticos, cada vez que salieran de la política parecería lo de las campanadas a medianoche, versión 3.0, verdad?”. Bien, el éxito ha sido mas bien discreto, tampoco me han escupido, ni nada parecido, pero el Jerezano, que es como si me hubiera puesto a picar palmas, se arranca con un chiste que, como buen levantino, me lo ha tenido que repetir para que me acabara partiendo lo que hay entre los glúteos:
“Disse que se juntan en Berlín el embajaor español y el alemán en casa del alemán, la cual, la casa, parecía la del Príncipe en verano, es decir, grande, vacía y con mucha antigüedad colgada de las paredes. El español le pregunta: Tío como te has podido montar esta casa tan grande, tan hermosa y tan cara siendo solo un político. El alemán le subió a la cubierta y le dijo; ¿Que ves? y el español dijo; Una autopista, a lo que el Alemán contestó; Pues eso, hacemos la autopista y ….., ya sabes”
“Al poco tiempo, por cuestiones de la seguridad nacional y otras estúpidas excusas para poder pegarse un viaje a España, se juntaron los mismos protagonistas, pero esta vez en la casa de Campo que el Embajador español tenía cerca de Madrid. La casa era como el doble de grande, de cara y de antigüedades colgadas en la pared que la del alemán, a lo que el teutón le dijo: “¿Quillo,  estoooo y de quéee? – El español hizo subir al alemán a la cubierta y le dijo; ¿Que ves? – El alemán contestó; Nada de nada – Pues eso, le dijo el español, de eso tengo yo esto, ….., ya sabes, ¿verdad?”
La mala fama de nuestros políticos va “in crescendum” y aunque hoy nos hemos reído mucho a costa de ellos, lo cierto es que una vez se acabó la guasa, la misma gente ha empezado a soltar fuego por la boca que me ha dado hasta miedo de oír la rabia contenida y el odio que soltaban todas sus expresiones y no dirigidas, exclusivamente a la clase política, ahí se han mezclado voces contra políticos, sindicatos, banqueros subvencionados y funcionarios. Quizás ello tenga que ver, eso sí, con la expresión que ha soltado mi amigo Pepe, al que llevaba en mi coche esta mañana camino de la Seguridad Social de la alicantina Calle Gerona, que al pasar por delante del Ayuntamiento, ha sacado la cabeza por la ventana y dirigiéndose al lugar donde estaban un numeroso grupo de funcionarios llorando y chillando, protestando por que les han retirado su paga extra que les dieron en su momento como premio a la eficacia y les ha dicho: “¿Pero vosotros de que coño os quejáis?” – Pepe, seguramente, está algo loco, pero yo no lo llevo mas en mi coche.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este blog comparte contenidos con otro de mis blogs a modo de copia de seguridad, el uno del otro, hasta el 24 de febrero de 2023

https://enriquetarragofreixes.wordpress.com/