miércoles, 26 de septiembre de 2012

¿La opinión cambia con la edad?


         
                         
26 septiembre 2012


Iba a mi marcha y sin pensar mas que en mis cosas. No obstante, cuando conduzco, y ahora que conduzco despacio, mucho más, no hace falta fijarme en nada especial para estar atento a todo lo que pasa delante de mi parabrisas. Pero hoy, quizás me haya pasado muchas mas veces, seguro, hoy, decía, me he dado cuenta que una señora bastante mas mayor que yo, en la Calle Pinoso, donde parece que por allí solo transitan coches de conductores supernerviosos, estaba arrancando a cruzar la calle por un lugar donde no había paso de peatones alguno. 

A riesgo de que dieran por donde gotean las jarras, de mi fiel 7, he frenado y con cara de aquél que va a venderle una casa o un par de kilos de sardinas, le he hecho un gesto con la mano para que pasara mientras mantenía esa falsa sonrisa de cura conciliador o la de el mismo Arthur Mas contando a la Parroquia catalana que la vida está en otra parte, y la mujer, con cara de no creérselo, ha pasado a toda velocidad sin darme ninguna muestra de gratitud. Mi niña, que no le pasa nada por alto, enseguida me ha dicho: “Como has cambiado, hace diez años te la hubieras llevado por delante o casi, pero seguro que no la hubieras dejado pasar y, además, le hubieras echado una buena bronca

Luego, en la barra de la Loli, he contado el suceso y todos han estado de acuerdo, incluso yo, en que hay una edad para hacer de joven y otra para hacer de viejo, el problema es no seguir esas reglas como algunas Divas/os del cine y/o de la vida fácil. Antoine, que hoy ha reaparecido con unos 15 kilos de menos, ha demostrado, claramente, que había comprendido el mensaje: “Mes amis, ya sé lo que queréis decir; cuando eres joven te parece bien echarle una guinda a tus pasiones sexuales en cualquier rincón, público o no,  y cuando eres mayor y ves que lo hace algún joven en una hamaca de la playa a la luz de la luna, te parece una guarrería

Pues eso, hay una edad para hacer cada papel en esta estúpida y hermosa obra de teatro que es la vida, nuestra vida.



8 comentarios:

  1. Aunque no tomamos nota para siempre (como hacen los animales y como deberíamos hacer nosotros) es evidente que los años van desfilando y a nosotros nos van pasando cosas, claro que sí y por supuesto ese bagage nos pesa, para bien y para mal. Para unas cosas somos más lanzados y otras nos dan más miedo. Es la vida.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si amigo EKK, pero lo curioso es que lo que antes me parecía normal, ahora me parece una barbaridad y soy/somos la misma persona.

      Eliminar
  2. Los años nos van amansando sin duda.......aunque en ocasiones pienso, si quizás demasiado.
    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, tú eres un niño aún, Antonio Gt, pero es cierto, no en el fondo, pero si en las formas.

      Eliminar
  3. Bueno. Exactamente la misma persona que hace años no somos. No recuerdo que filósofo griego decía algo así como que es imposible bañarse dos veces en el mismo río. Yo mismo, miro atrás y me doy cuenta de que con los años se me ha dulcificado bastante el carácter, tengo mucha más paciencia, no pierdo el tiempo molestándome en otorgar a los que intentan hacerme mal un tiempo que no se merecen, etc. (por cierto que si, que con los años he conseguido aprovechar mucho mejor mi tiempo).

    Y si, también cambian las cosas que te apetece hacer y dejar de hacer.

    Una entrada interesante. Un saludo Enrique.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Podría suscribir, íntegramente, tu comentario pepe Deapié. A mi, para suerte mía, me ha pasado lo mismo: Mas dulce, menos rebelde y un gran seleccionador de mi tiempo.
      Un honor verte por aquí.

      Eliminar
  4. Cierto, Enrique, pero prefiero la hamaca. Vaya fotografías y vaya envidia cochina y malsana que me sale por los ojos, le da una patada en el culo al nene y le digo "...¡Conyo, quitate de ahí marrano que este sitio es mío!"

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sabía por qué te llamo como te llamo, a veces, amigo Campillo. Aquí la prueba, yo, por ejemplo, me echaría al agua.

      Eliminar

Este blog comparte contenidos con otro de mis blogs a modo de copia de seguridad, el uno del otro, hasta el 24 de febrero de 2023

https://enriquetarragofreixes.wordpress.com/