30 abril 2013
Las cosas están mal, Enrique, y diga lo que diga este gobierno de débiles y cobardes, una sociedad en recesión no genera empleo. Tengo a mis dos hijos en paro, divorciados, viviendo en casa y pagando pensión a sus ex que también pago yo, claro.
Jaime, jubilado, a sus 73 tiene que estar en la sombra de una fabriquita de calzado de lujo, que producen 500 pares, que regenta su sobrina en Monóvar. Le ocupa medio día pero el resto del tiempo intenta vender su quasi embargado patrimonio inmobiliario, mal comprado en el período 2000/2006. Su gracia de hoy, al margen de andar bebiendo ron como un cosaco a todas horas, es que le ha llegado al baúl de las ideas lo que ofrece una inmobiliaria, en un cartel de "se vende", en el que ha colocado una apostilla sorprendente: NUEVO PRECIO.
Se le "partía el culo", mostrando una desbordante risa floja, ante la foto que me mostraba con tal anuncio..... "Es que, Enrique, creo que ni así los vendo, no, seguirán conmigo, se han acostumbrado y ahora ni rebajando el precio se los llevan"
Se le "partía el culo", mostrando una desbordante risa floja, ante la foto que me mostraba con tal anuncio..... "Es que, Enrique, creo que ni así los vendo, no, seguirán conmigo, se han acostumbrado y ahora ni rebajando el precio se los llevan"
Amar en tiempos difíciles es duro, pero es entonces cuando puedes darte cuenta de que algo hiciste mal cuando eran chicos: Les diste lo que a ti te negaron. Lo del Nuevo Precio de la poco imaginativa Inmobiliaria puede darnos risa, pero su significado, seguramente, no tanto y mucho menos cuando ni así las cosas acaban resolviéndose como quieres.
Si, si esta mal.
ResponderEliminarUn abrazo Enrique
==========================, Eva.
EliminarTodos de algún modo jugamos a es lotería,,,,,,lástima que algunos se gastaron más de lo que debían. La impertinente realidad!
ResponderEliminarEsperemos que para esa época, amigo Antonio, la crisis se haya terminado y tus hijos te mantengan a ti. Un abrazo
Eliminar