El día de “L´home dels nassos" y el de las felicitaciones inteligentes

31 diciembre 2013

Una de las primeras cosas que me pasan por la imaginación en un día como hoy es aquel cuento que me contaba y me contó hasta que se fue, mi querido Abuelo Enrique,  que hoy, día 31, era un día muy especial. Era el día del Hombre de Las Narices. Me contaba que hoy andaba un hombre por la calle que tenía tantas narices como días tenía el año. Como un poseso de envidiable carrera, salía a las compras que me encargaba mi Madre por el barrio, frente al Hospital de San Pablo, en la Barcelona de los 50, y buscaba y buscaba a mi “Hombre de las narices”, pero nunca lo encontré.

(31 diciembre 2009: El día de “L´home dels nassos”)

Por otra parte hoy es día de profunda manifestación de deseos de bondad y de un futuro mejor, en las que todos compiten por mandar la felicitación mas inteligente, original y sencilla que jamás otro haya podido crear. Antes lo hacíamos por teléfono y hasta por carta, hoy es tremendo ver como no hay mesa familiar con humano alguno que la atienda. Todos están mirando como posesos a su móvil lanzando decenas, quizás cientos, de mensajes por guasap u otras mil formas-e de hacerlo. A mi me encanta verlos, quizás a otros no mucho. Da la impresión, lo que ves, que somos como un hueso para un perro, el que tiene lo guarda y no lo usa porque sabe que es suyo y por contra se lanza a buscar otros huesos donde roer más allá de su espacio. No os enfadéis si esta noche los veis a todos sin que os hagan NPC, no, no temáis, os quieren y saben que sois como el hueso del perro que lo tiene escondido. Le prestan mas atención a los que están lejos y que también quieren, si, pero recordad que aquellos, los que no están, no tienen la suerte que tenéis vosotros al tenerlos en la mesa aunque, si, repito, no os hagan NPC. Pues bien, de entre todas ellas, (de las felicitaciones recibidas), me quedo con ésta y que os dedico a todos:

“Te deseamos que la rutina se convierta en sorpresa, los enfados en sonrisas, la tristeza en esperanza, que tu bandera sea el amor y tu lenguaje los besos.”

 enriquetarragófreixes