27 febrero 2014
Luego me recriminarán a mi, como no, que el arte no solo es mostrar cuerpos desnudos y color en ciclos inexplicablemente perfectos, claro, pero resulta que, desde hace ya algunos años, bien sea para recaudar fondos para “el hambre de África”, para los niños necesitados del Sagrado Corazón o para cualquier iniciativa de tipo social y/o popular, aquí todo el mundo se pone en bolas para recaudar fondos y, claro, los más torpes se preguntan: ¿Eso es sacarle caldo al morbo, pura generosidad expresiva o es, realmente, que ya solo se piensa en clave de tetas y culos como le gusta llamar a esas cosas a mis nietos? En cualquier caso, bienvenida sea esa iniciativa, claro, especialmente cuando la realidad se pone muy aburrida.
Dejo aquí, a modo de ejemplo, una imagen y un enlace hipervinculado y subrayado, a la página de la infatigable Falla El Centenar de la Ploma de Catarroja donde muestra su calendario noblemente recaudatorio. Echarles una mano, en el buen sentido de la expresión, será, siempre, un acto de generosidad.
¿Van a alambrar África o saciar el hambre los valencianos?
ResponderEliminarIrreprochables bacanales para unos cuantos, Maria Luisa. Pura vanidad. Viví en Valencia 7 años y conocí la fiesta en profundidad. Nada social, solo narcisismo, egoísmo y mucha marcha privativa y privada. Con todo, las disfruté plenamente, es decir, me comí la manzana.
EliminarChe con les xiquetes..................
ResponderEliminarSi, che que bó, amigo argy. Al menos se lo curran, porque los tíos son como los que limpian cristales en el semáforo ... per res demanen 200€ al any, per una festa que no mes es per ells
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