Fotografía
de Johan Joubert - El tren de la historia (del 78 hasta hoy)
30 junio 2015
Cuando era niño soñaba
con tener, algún día, pelo en el pubis, saberme cortar las uñas de la mano
derecha, meterle mano a la niña del sexto y en la quimera, (entonces), de poder
estirar la mano para meter mi voto en una urna. Pero, hoy, acordándome de
aquella nefasta y estúpida inquietud, (la de tener pelo en el pubis y no en la
de votar), he vivido la mayor sublevación de mis neuronas cuando un querido y
recalcitrante amante de la unidad de la Spain de los Spanish, me ha dicho que,
“con dos cojones”, (siempre imprescindible para estas gestas y estas
gentes), va a pintar su trozo de fachada de color verde y que se declara como
vivienda independiente para no tener que pedir permiso a la Comunidad de
Propietarios, ni al Ayuntamiento, ni a la Comunidad Autónoma y que solo
él manda en él y sus cosas … que España solo hay una y ya está harto de tanto “Compromís”,
tanto “Guanyem” y tanta Autonomía de los cojones …
Con esa declaración,
según dice, llevan todo el día abrazados todos los de la familia como si
hubieran alcanzado la gloria divina a la vez que han agotado una cajita
de mahou y
han colgado, como debe ser, la bandera patria en el balcón donde todo el mundo
cuelga las toallas de la playa. Creo que mi españolísimo vecino ha querido
hacer una machada al estilo “con un par”, (sospecho), pero creo
que ello entraña una forma de ver las cosas como si ya fueran así, y a mi, ante
la realidad de sus nefastas ilusiones, me han entrado ganas de volver a mi
situación anterior a la del crecimiento del pelo en el pubis, es decir, volver
a la inocencia, a la dignidad representativa y a la relación correcta entre
inteligencia y necesidad ... a ver si desde ahí podríamos volver a empezar, es
más decir, volver al 78 y practicarle un electroshock en la parte blanda del
que se preocupó en la creación de aquel estado efímero y quimérico que empezó,
haciendo concesiones a los salientes y que acabó, según notamos en nuestras
llagas, como un rancho de bandoleros y de patriotas a favor del favor al amigo
y a la sastrería de bolsillo.
En fin … como diría mi
amigo el catedrático de la UCAM cuando me desahogo con él … “Niño: ¿Has
terminado? pues anda … ya puedes tirar de la cadena” … a ello voy pero en
sentido subliminal … sin que se note … no sea que se enfade mi vecino … no
obstante, ya sabéis, esto es puro desahogo, no sirve de nada, pero te quedas
más a gusto, contándolo, que un marrano en un charco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Este blog comparte contenidos con otro de mis blogs a modo de copia de seguridad, el uno del otro, hasta el 24 de febrero de 2023
https://enriquetarragofreixes.wordpress.com/