Publicado inicialmente aquí: Ir de Hospitales y eso de vivimos como si nunca fuéramos a morir | Esas pequeñas cosas
10 febrero 2017
Estando hoy, en ello, en eso de “Ir de Hospitales”, me he encontrado, (sentado a mi, lado), a uno de los más veteranos abuelos, cliente de lujo,del HSJ, y a su lado su inseparable Paquita. Ella, (la Paqui, que fue gran cocinera y regente de un importante Restaurante de La Playa en los 80 y hasta el 2000), mucho más animada a eso del uso del guasap y del Facebook, y cuando parecía que ya no estaba oyendo nada de lo que hablábamos, me mira por encima de sus viejas pero elegantes gafas y mientras hablábamos de lo inevitable allí, es decir, del dolor A, del Médico B, y del tratamiento C, me dice: “Enrique, la vejez es un premio, nosotros hemos vivido la vida que hemos querido vivir y lo hemos hecho bien, no nos arrepentimos de nada, solo de una cosa, no haber tenido hijos, no tuvimos tiempo”.
Y mientras dejé a mis amigos del importante y aleccionador recreo, cual es eso de “Ir de Hospitales”, que fueran hacia su cita, a mi me llegó, curiosamente, a mi guasap un mensaje en forma de vídeo de mi amigo Campillo, que me ha hecho creer que, muchas veces, las cosas pasan así, como nos llegan, porque alguien que tiene un privilegiado punto de vista sobre lo que hacemos o creemos … o queremos, las mueve. Aquí dejo el vídeo por si tuvierais unos segundos para verlo y trasladar su mensaje a quien corresponda:
enriquetarragófreixes
Hola Enrique, ¿Me reconoces desde esta cuenta?
ResponderEliminarEs cierto, desde que tengo uso de razón la vida ha sido así, querer que pase algo, (lo que sea) para poder pasar a otra cosa. creemos que consiguiendo esa cosa: dinero, hijos, trabajo...etc lograremos darle ese sentido a nuestra vida. No se si me estaré equivocando pero creo que todos creemos que con ello conseguiremos cierta "libertad" o el liberarnos de "algo" que nos pesa. En mi caso , quería llegar a los 18 para poder independizarme , irme de casa. me fui un poco más tarde , con 22 y ahora hecho de menos muchas cosas. Las obligaciones que tenia mi madre , ahora son las mias sin tener hijos. El tiempo corre y ahora ya anda en nuestras cabezas, en la mía y la de mi marido , otro objetivo. Trato de parar de esta constante prisa, salir , hacer fotos, observar a la gente, sentarme y no hacer nada, simplemente disfutar de estar en calle. pero pronto suena el dichoso whatsapp y sus notificaciones jajajaj y dirás :¿ Porque no le quitas el volumen al móvil? porque siempre estamos preocupados de ese cambio que nos pueda llegar a través del móvil. Gran entrada, me haces reflexionar y mucho. A veces me gustaría tomarme la vida un poco más como tú. Edad y experiencia. Un gran saludo!
Sí te reconozco, Keren, como no ... tus comentarios empiezan a ser de los que hace falta recibirlos.
EliminarGracias