El Hiperrealismo de Ron Mueck
05 marzo 2017
A mi me gustaría que los domingos fueran días normales, si, quiero decir como aquellos domingos en los que la gente que nace en la misma casa se junta para recrearse en ello. En esa idea me instalé hace ya muchos años y en eso estoy. Pero, a veces, cuando miro a mi alrededor me doy cuenta que no se si todo el mundo sabe lo que es eso. Como cuando rezaba a mi Diosito cuando tenía algunos años menos, es decir, hace algo mas de medio siglo, ahora me pongo a rezar, como entonces: Deuset meu, no dejes que mi Papá y mi mamá, me dejen nunca, estén donde estén.
¿ Y a qué llamamos normalidad los que creemos seguir siéndolo? Lo mejor es que cada uno haga lo que más le plazca. Eso sí con una premisa; sin fastidiar a los demás y considerándose con ello feliz. Lo demás como Alguien dice…” se os dará por añadidura”. Felicísimo domingo.
ResponderEliminarClaro, amiga María Paz, yo lo que siento es ver a mis amigos como en un día como hoy, los suyos, les dejan solos con cualquier excusa. Me da mucha tristeza ver como se enganchan en la conversación para no dejarme marchar, paRafa no quedarse solos. Me da vértigo.
EliminarFeliz domingo querida amiga
Muy vacías deben ser las conversaciones con los que tienen alrededor. Es bueno cambiar de interlocutor por mantener variedad en muchos puntos de vista y hasta sano hacerlo, pero no de la manera y forma en que muchos como bien sabes, lo hacen o les hacen. Triste, pero cierto. Resto de domingo en feliz compañia.
EliminarNo pueden ser normales porque sus tardes son tristes.
ResponderEliminarMuy tristes, amiga Teacy, un horror inexplicable.
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