05 febrero 2022
- Anoche ... ¡qué noche!
- Noche perfecta.
- Encontrarte con los amigos de los últimos veinticinco años, siempre es una alegría. Con algunos fue un reencuentro tras un largo parón pandémico. Las emociones flotaban a cada encuentro y/o reencuentro con cada uno de ellos.
- Miguel me cuenta, juntando dos de sus dedos y mano en alto: "Estoy a esto de llorar".
- Abrazos, charla, copeo, música, danza ... no éramos muchos. Faltaban los más miedosos, por un lado, pero por otro los que faltaban, desgraciadamente, ya no volverán nunca más. El dichoso virus se los llevó.
- Con todo, penas y alegrías, fue gratificante salir, abrazar y hasta escucharnos a pesar de las mascarillas, la distancia y ... la música.
- Volvió la noche del amor pretendido, del flirteo, de la charla incontenida, del desfile de modelos que cada cual procura realizar, halagos, besos ocultos, y una noche mágica, noche en la que los hijos se tienen que hacer cargo de los suyos con un "hoy los abuelos no vendrán, han salido a pasar la noche con los amigos". Es la noche de los llamados viejos aún vivientes. Viejos que viven con gran energía una noche recuperada, la de los viernes la "nuit", la noche en la que se sienten rejuvenecidos, libres y coquetos al máximo nivel.
- Qué bello es vivir, decía mi amiga Laura, qué bello es poder abrazarnos, querida amiga - le dije, y así fue, una gran noche, muchos abrazos, mucha amistad retenida que anoche explotó por donde mejor se siente ... por el lugar que ocupa el alma dormida.
- Música maestro ...
Hay que celebrar lo que se tiene y seguir. Te mando un beso.
ResponderEliminarBravo, esa es la actitud, Judit.
EliminarAsí espero seguir, mientras me dejen.
Un abrazo.
Que bonita noche. Yo aun no salgo a festejar mi vejez ni nada de nada, por aqui donde yo vivo aun no vamos a fiestas... mi esposo y yo siempre estamos y andamos solos, lo necesario, Saludos amigo Enrique, me alegro por ti.
ResponderEliminarGracias, amiga Sandra. Por aquí, aún y habiendo gran número de contagiados, como las consecuencias de esta variante actual, (ómicron), son leves, la gente anda muy confiada.
EliminarUn abrazo de domingo.
El guion parece acorde con las "circunstancias" de los presentes... Las que detallas, no que yo las reconozca como tales.
ResponderEliminarLa música, movida... La noche, sugerente. Lástima que me pille a desmano... :))))))
No somos de viernes la "nuit", más bien de viernes "sofá". Y casi cada día de la semana. Por lo menos a esas horas. Pero aburrimiento ninguno amigo.
Lo dicho, no me hubiese importado ser uno más en el encuentro. Otro día tal vez!
Abrazos Enrique.
Gracias, Ernesto. Te doy toda la razón, lo importante para ser feliz, donde éstes, es más importante con quien que el lugar.
EliminarTuvimos un pequeño y corto desenfreno que esperamos repetir, mientras me dejen.
Un abrazo fuerte, compañero.
Me gustan tus recuerdos Yo no los tengo
ResponderEliminarvivo siempre en el hoy
sin la nostalgia de lo que fue
y no puedo cambiar en mi alma
En este caso, querida Mucha, fue una noche real, es decir, en directo, live, una noche loca, propia de nuestra joven y veterana edad.
EliminarUn abrazo muy fuerte.
La vida es hermosa, Enrique y se notan tus ganas de vivir.
ResponderEliminarHas descrito de manera magistral el encuentro con los amigos de siempre después de largo tiempo separados.
Todo ese cúmulo de sensaciones que hacen nos sintamos vivos.
Me gusta esa pasión tuya por contar la belleza de los pequeños detalles y momentos.
Este tiempo que nos ha limitado tanto, nos está robando pedacitos de vida.
Abrazos querido amigo.
Gracias, Maripaz. Lo has contado de maravilla: "Este tiempo que nos ha limitado tanto, nos está robando pedacitos de vida".
EliminarVivamos.
Un abrazo fuerte.
La vida siempre te ofrece regalos.
ResponderEliminarSiempre, en este caso, vivamos con respeto, pero sin miedo.
EliminarUn abrazo, Tracy
Si no es ficción, Enrique, me alegro mucho por ti, ya que la vida y los amigos, hay también que disfrutarlos, y más, si tenemos ya cierta edad, así que vivan esos viernes de la "nuit", y "que nos quiten lo bailao", aunque la verdad que yo ya bailo poco.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo Enrique.
Tan real como la vida misma, Manuel. Una noche inolvidable
EliminarUn abrazo fuerte.
Qué bien, Enrique. Qué agradables y sorprendentes esos encuentros con amigos tanto tiempo sin ver. Y esas miradas disimuladas al constsatar el paso de los años en los demás, preguntándonos, ¿ yo también habré envejecido como ellos?. Siempre pensamos que no.
ResponderEliminarPero seguro que el más animoso serías tú.
Un abrazo.
Jajajajajaja, ay Conchi. No hay problema, las sombras de la noche nos salvan, además, ya sabes aquello de: "De noche, todos los gatos son pardos".
EliminarUn abrazo fuerte, querida amiga.
Me alegro mucho de esas palabras que destilan felicidad...
ResponderEliminarUn abrazo, amigo
Gracias, Ildefonso, así es y así fue. Esos momentos que hacen falta vivirlos para sentirse vivo.
EliminarUn abrazo, fotógrafo.
Genial noche amigo. Ya es tiempo de vivir - como bien lo dices- con respeto pero sin miedo.
ResponderEliminarNada más reconfortante y saludable que encontrarse con esos amigos y amigas de siempre y echarse unas buenas risas.
Seguro el alma se siente más liviana y los días se ven más luminosos luego de esos encuentros.
Me gusta como lo cuentas.
Abrazo va
Días que son necesarios, muy necesarios, Dulce Lu, necesarios para sentirnos vivos.
ResponderEliminarUn abrazo de lunes ... como pasa el tiempo.
Una noche genial de encuentros y amigos es para disfrutar. Yo también lo hago hace bien al espiritu. Siempre hay que celebrar la vida!! Un abrazo grande
ResponderEliminarAsí es, Hanna, hay que vivir lo que nos quede y lo que nos dejen.
EliminarUn abrazo.