04 agosto 2023
- Revisaba - cual supone leer la prensa del día - el parte de guerra diario, sea una guerra real u otra de tipo verbal que es lo que más tenemos por aquí, estupideces y banalidades de los políticos que nada resuelven de la vida de los administrados, desconexión nacionalista incluida, y promesas de que "todo irá mejor con nosotros" (unos y otros dicen lo mismo), y "abajo los nazis y el capital asesino", cuando he llegado a la imagen de arriba ... y mientras la mostraba en el SuperSmartTv del Ateneo, se me ha escapado un ... "Quejarnos ... ¿De qué?" ... ay, Dios mío la que se ha armado.
- Todos, absolutamente todos, me han intentado convencer de que la calidad de vida solo es comparable en tu realidad más cercana:
"En ese mundo que nos muestras, Enrique, seguro que también hay privilegios vitales y uno de ellos será, sin duda, tan solo vivir ... y serán felices por ello ... amigo, no debes dejarte impresionar, cada mundo tiene sus hitos de felicidad"
- ... y así me lo hizo saber Leonor en un alarde de quererme trasladar con la mirada, sin palabra alguna, pero susurrando de modo inaudible un "te quiero amigo, no intentes preocuparte por arreglar algo donde no puedes hacer nada por impedir lo que pasa ... eso es cosa de la conciencia social del mundo donde nos han instalado y de los que pueden hacerlo y tienen poder para ello, pero ni tú, ni yo podemos hacer nada para impedirlo".
- Tendrá razón Leonor, o eso quiero creer, pero a mis años me molesta que sea así y que yo no pueda hacer mucho por impedirlo o mejorarlo.
Cinco de mis mejores refugios
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No creo que Leonor tenga toda la razón. Uno en parte en su pequeño nicho puede hacer algo. El problema es cada vez estamos condicionados a que alguien nos salve y que somos muy poca cosa para hacer algo. También esta nuestro miedo e indiferencia. El mundo se destruirá por eso. Te mando un beso.
ResponderEliminarDices bien, Judit, somos muy poca cosa y eso cuesta aceptarlo y cuando empiezas a hacerlo (aceptarlo), no sirve de mucho.
EliminarUn abrazo, escritora.
Sorry por un comentario equivocado de lugar y que coloqué aquí y que ya he eliminado, No era su lugar.
Cierto amigo. Leonor tiene razón.
ResponderEliminarLo que compartes es una imagen de impacto... La realidad se está manifestando ahora mismo.
O tal vez no...
Fuerte abrazo Enrique.
Sí, Ernesto, seguramente es así, cuesta aceptarlo, pero como dicen en Murcia, "lo que é, é".
EliminarFeliz sábado
Mi naturaleza es rebelde e inconformista, me niego a creer que nada puede cambiar. Procuro que mi trato con los demás sea afable y sincero. No puedo tomar decisiones de estado, voto, protesto, me declaro antibelicista, muchas veces una lucha vana. Recordemos la guerra de Irak, España entera se levantó en contra de las armas, era el capricho de Aznar y no permitió que se negociara. El lastre económico llega hasta hoy y las víctimas humnas son innumerables, entretanto Aznar y sus secuaces duermen entre sábanas de seda.
ResponderEliminarUn beso.
Así es la historia del mundo y sus malévolos y contradictorios gobernantes, Ilduara. Hoy sentía curiosidad, en mi constante interés por la historia reciente, en saber qué tipo de justicia se practicó en el crimen de los Urquijo; qué clase de castigo se infringió a los Ruiz Mateos que vivió y viven sus descendientes, en la abundancia tras ser expropiado de todo capital; lo mismo podríamos decir de Mario Conde que sigue disfrutando de todos sus bienes y frutos de sus tierras cuando fue castigado y expropiado tras un curioso juicio; cómo podemos seguir viendo que un malhechor rompe escaparates es detenido tras más de doscientos arrestos por el mismo tipo de delito y ya no hablemos de violadores, políticos corruptos con sentencia desfavorable o que son liberados de la cárcel porque les dan un año de vida y luego viven veintidós.
EliminarEn fin, Ilduara, este es nuestro mundo, el que consentimos y ante el que nos mostramos muy indefensos por no decir otra cosa menos correcta.
Feliz sábado, si nos dejan.
Enrique, es durísima la realidad de tanta gente en el mundo, los diezmados por la guerra, por el hambre, por razones climáticas, por racismo etc etc que si estuviera al alcance de nuestras manos resolverlo, dejaríamos la vida en ello y eso tendría sentido. Lo que no tiene sentido, me parece, es enfermarnos por algo que no podemos solucionar.
ResponderEliminarEn todo caso yo sí creo que podemos realizar pequeñas acciones para, en algún punto, colaborar con esas tremendas organizaciones que hacen lo imposible para mejorar algo, esas ONG de ayuda humanitaria.
Eso más acciones cotidianas para concientizar, al menos, a las personas de nuestro entorno. Poquito a poco....quién sabe.
Me llegan las terribles novedades a través tanto de ACNUR como de "Médicos sin fronteras" pues estoy asociada a ambas.
Y eso, tal vez, me hace ser muy agradecida con la vida que ma ha tocado y me toca.
Es un tema con mucha tela para cortar y distintos puntos de vista según el enfoque que cada quien le de.
O sea, mejor me voy
Abrazo ¡disfruta del sábado!
Muy instructivo y acertado tu comentario, dulce Lu. Nosotros estamos colaborando económicamente con MSF y con EDUCO y nos cuentan que siempre les faltan recursos.
EliminarFeliz domingo