15 febrero 2024
- Me decía mi Madre, cuando yo apenas empezaba el bachillerato, que la brevedad a la hora de "decir" es sinónimo de sabiduría, de prudencia y de saber estar: "Habla poco y habla bien, hijo, cuando sepas hacerlo el mundo te abrirá casi todas las puertas en las que puedas crecer y ser feliz".
La brevedad nos permite no andarnos por las ramas. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarYa sabes, Carlos Augusto, lo bueno si breve ...
EliminarUn abrazo fuerte.
Echo de menos el tiempo en que los que sabían hablar y eran honestos regían los paises. Pienso en los discursos de Azaña y me avergúenzo de los políticos actuales usando insultos y tacos en el congreso.
ResponderEliminarUn beso.
Decepcionante, Ilduara, mucho.
EliminarFeliz viernes, si nos dejan.
Os bons conselhos maternos são sempre de levar em conta.
ResponderEliminarAbraço amigo.
Juvenal Nunes
Nada como una Madre para ser la primera fuente educativa de la sociedad.
EliminarUn abrazo muy fuerte, escritor.
Enrique, sabiduría de Madre, habla lo necesario y se siempre amable.
ResponderEliminarUna palabra demás puede llegar a herir sin quererlo
ABRAZOS
Así es, VyDV. Las palabras que poco debiera costar usarlas bien.
EliminarUn abrazo.
Entonces tengo que concluir, querido Enrique, que yo lo llevo muy oscuro, porque ya sabes lo mucho que me enrrollo con todo.
ResponderEliminarYo me disculpo a mí mismo diciendo que se trata de temas complejos, que quiero dejarlo todo muy claro, que hay muchos temas colaterales, que aún sin haber temas colaterales me gusta ir enlazando cuestiones....
En fin, que me absuelvo.
El caso es que de temas más triviales hablo poco o nada, como por ejemplo con el futbol, los deportes en general y cualquier tiempo de competición (ya sabes...). Busco la manera de escabullirme disimuladamente (algo así como Peter Sellers en la película "El Guateque")
Un enorme abrazo, querido amigo!!!
Tú eres un gran escritor y una gran persona, Querido Emilio, tú te puedes permitir hablar de cualquier cosa pues siempre lo harás bien.
EliminarUn abrazo para un feliz viernes, poeta enamorado.
Muchas gracias por tus palabras. Soy aprendiz. Y soy un intento de... Así que agradezco enormemente tus palabras, pero las tomo con la máxima humildad, sin terminar de creer que es como dices. Además, cada día es una nueva vida, y cada día, olvidado el pasado, queda patente el mejor o peor resultado de mis esfuerzos.
EliminarPero más que hablar de mí, prefiero hablar de tí, querido maestro, de tu sabiduría, de tu grandeza para lidiar con los inconvenientes de la vida, de tu bella sensibilidad, de tu desafiante coraje, de tu amor por la vida, de tu amplia experiencia, de tus enriquecedoras enseñanzas.
Eres una de esas personas entrañables que con su generoso ejemplo dignifican y embellecen la vida de los demás.
Y si tengo permiso para extenderme, no tengo reparos en decirlo. Y no sé si será así en lo demás que digo, pero al decir esto no tengo dudas de que estoy siendo justo con tu persona y lo estoy haciendo bien.
Un enorme abrazo, querido amigo!!! Y gracias por ser tan generoso e indulgente...
Ay, amigo Emilio, me emocionas siempre. Gracias por tus elogios, palabras que siempre ayudan a querer vivir, a sentir y a mostrarse afable.
EliminarUn fuerte abrazo.
Buen consejo. Un beso
ResponderEliminarLo fue. Gracias, Susana.
EliminarUn abrazo.
La sabiduría de las madres nunca se olvida y, sí, es verdad, con pocas palabras se dice mucho.
ResponderEliminarAbrazos estimado Enrique
Eso creo yo también, Tatiana.
EliminarUn fuerte abrazo, poetisa.
No sólo sabía, sino que tu madre te enseñó bien.
ResponderEliminarY el alumno aprendió rápido y definitivo...
Definitivo en lo de "habla bien y el mundo te abrirá todas las puertas"...
Ya en lo de "habla poco", amigo Enrique, lo dejo en cuarentena... :))))))
Abrazos.
Jajajajajaja, eres lo mejor, querido Ernesto.
EliminarUn fuerte abrazo.
Consejo sabio.
ResponderEliminarNo tuve la suerte de tenerlo, a esa edad yo era tímida y hablaba poco...
Fue muy difícil exponerme escribiendo poesía...
Y ahora hasta tengo sorpresas desagradables con la traducción...
Dejé respuesta a tu comentario y al de Carlos...
Un abrazo, amigo.
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Voy a verte, ahora mismo, no quisiera haber metido la pata, querida Majo.
EliminarUn abrazo.
Fuia verte y no vi nada raro, Majo ... ¿hice algo mal o que no te gustó?
EliminarEstá todo bien, Enrique.
EliminarFui yo quien encontró muy extraña la traducción de 'âmago' a 'núcleo'.
Nuestros idiomas son muy parecidos, pero a veces el significado sorprende.
Buen fin de semana. Un abrazo, estimado amigo.
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Me quedo más tranquilo, gracias por aclararlo. Feliz domingo
EliminarAcá vengo amigo luego de mi "odisea" sin intenet.
ResponderEliminarBueno, creo que hablo bien, que soy amable, que trato de ir siempre por el lado positivo a la hora de decir algo poco agradable pero...
¡NO SÉ HABLAR POCO! ¡Siempre me enrollo!
La brevedad sólo la consigo cuando escribo relatos.
De hecho, los cuentos breves son con lo más me identifico a la hora de escribir.
Abrazo ¡feliz viernes! Y disfruta del finde
Gracias, Dulce Lu, jajajajaja, yo también hablo mucho, mis años de conferenciante me dejaron con esa costumbre, no obstante, si hablas bien y te escuchan o tu charla es de interés, es a eso a lo que quiero referirme con esa frase. Lo peor es cuando alguien habla mucho y mal y, encima, torpedea todas las conversaciones. Tú escribes de maravilla y siempre creas mucho interés en tus textos, por lo que debo suponer que hablarás, también, de maravilla.
EliminarFeliz domingo, dulce Lu.
Un consejo sabio de tu querida madre. Beso
ResponderEliminarGracias, Hanna, no siempre lo puedo cumplir, pero es un objetivo que así fuera (cumplirlo).
EliminarFeliz domingo.