lunes, 13 de julio de 2009

No es San Fermín, pero San Enrique, quizás tampoco, ¿O sí?


13 de julio 2009: 


Yo nací el día de San Enrique de hace ya 60 años. Sí, sí, he dicho sesenta. Será una gran fiesta, pienso celebrarlo a lo grande, que, en el fondo, será como siempre. ¿Pero como hablas de celebrarlo en futuro si hoy es el día de San Enrique?, me dice mi amigo de Santomera que me acaba de llamar.

La pequeña GP de las "o no masticas", (como así lo llama mi amigo José Luis el de Iberdrola, el cual así ha comenzado su felicitación-e, esta madrugada, en clara alusión a la escasez de piezas dentales que se supone debes tener a esta edad), decía que la GP de las Onomásticas, del día del Santo, para entendernos, es que dependen, mas bien dependían, de que unos señores, habitualmente de negro, las pusieran o quitaran del día tal o del día cual, cual es el caso del mío, ese es el caso del querido San Enrique, que fue mas Santo de lo que todo el mundo se cree, o sabe.
Cuando yo nací, a las 00:30 h de la madrugada del día 15 de julio, mi abuelo, que también era Enrique, decía; "no os preocupéis, no saldrá hasta que sea el día del Santo". Y así fue, por poco, pero así fue. Pasa que los que organizan las cosas del santoral lo cambiaron hace ya muchos años al día trece del mismo mes, o sea; al día de hoy.
Por tanto, desventurados y jóvenes amigos, (los viejos ya lo saben), hoy no es mi día, mejor dicho, no era mi día.
Me explico; Hace ya unos cinco que decidí celebrar mi Santo el 13 y el cumple el 15, así los amigos mas rácanos no se podían ahorrar un regalo.
Por tanto y termino con ello este pequeño alegato: Gracias amigos, Los de la Fé no se si mueven montañas, mueven el Santoral y muy poco los argumentos, pero yo, gracias a ellos, ahora, en lugar de cabrearme con ellos, (que fue lo que hice siempre desde que lo cambiaron y hasta hace cinco años), ahora estoy mas contento que un marrano en un charco, hoy es mi Santo, viva San Enrique.
De él os voy a contar, tan solo, el motivo de su santidad. El relato es muy revelador. Ahí os lo dejo, a continuación.

Un aviso que lo llevó a la santidad:
Al poco tiempo de haberse muerto su gran maestro, San Wolfgan, vio Enrique que se le aparecía en sueños y escribía en una pared esta frase: "Después de seis".
Él se imaginó que le avisaban que dentro de seis días iba a morir y se dedicó con todo su fervor a prepararse para bien morir. Pero pasaron lo seis día y no se murió.
Entonces creyó que eran seis meses los que le faltaban de vida, y dedicó ese tiempo a lecturas espirituales, oraciones, limosnas a los pobres, obras buenas a favor de los más necesitados y cumplimiento exacto de su deber de cada día.
Pero a los seis meses tampoco se murió. Se imaginó que el plazo que le habían anunciado eran seis años, y durante ese tiempo se dedicó con mayor fervor a sus prácticas de piedad, a obras de caridad y a instruirse ejercer lo mejor posible sus oficios, y a los seis años... lo que le llegó no fue la muerte sino el nombramiento de Emperador.
Y este aviso le sirvió muchísimo para prepararse sumamente bien para ejercer tan alto cargo.

Feliz día a todos y gracias por la felicitación a los 13 que ya lo habéis hecho.



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