¿La inexperiencia de los neoprofesionales compite con la falta de formación de los que se dicen “con experiencia”?

29 abril 2010

Tenía hoy una conversación virtual, muy dura y seguramente inútil, sobre la fuerza de la experiencia a la hora de tomar decisiones de contratación laboral o profesional, en el mundo profesional o empresarial de hoy. Mi joven amigo me decía que eso era cosa antigua y que los profesionales de hoy salen mejor preparados que los de nuestra época y que, la queja constante de los titulados de mas de 50 años, es vomitiva y “se quejan de vicio”, pues lo suyo es, simplemente, falta de formación y a pesar de su experiencia en nada les superan. Además lo tiene demostrado, según me dice y casi me demuestra, los jóvenes, hoy por hoy, son la mejor opción a la hora de contratar a un profesional.

Lo cierto es que ese debate tendría un largo desarrollo, a mi juicio, siempre que se valorase la demostrada calificación de los jóvenes, por un lado, y la calidad de la experiencia de los otros. Seguramente, habrá de todo. Como la cosa no ha acabado muy bien, hemos decidido dejarlo para poder continuarlo con un foro de mayor tamaño y calificación, pero en otra ocasión.

No obstante, y al “pelo” de lo que estaba aquí hablando, mi amigo el rey de la Goleta, me ha mandado una graciosa reflexión, sobre el asunto en forma de cuento:

La sabiduría de los años. 

Un viejo tenía un lago en su finca. Después de mucho tiempo, decide ir a ver si estaba todo en orden. Cogió un cesto para aprovechar el paseo y traer unas frutas por el camino.

Al aproximarse al lago, escucho voces animadas. Vio un grupo de mujeres bañándose, completamente desnudas. Al verlo todas se fueron a la parte más honda del lago, manteniendo solamente la cabeza fuera del agua.

Una de las mujeres gritó:
-No saldremos mientras usted no se aleje!

El viejo respondió:
-Yo no vengo hasta aquí para verlas nadar o salir desnudas del lago!

Levantando el cesto, les dijo: 
- Estoy aquí nada más para alimentar al cocodrilo...

Edad, experiencia y oficio, siempre triunfaran sobre la juventud y el entusiasmo.

El cuento es partidista, en esta ocasión, pero es solo un ejemplo.

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enriquetarragófreixes