27 enero 2011
La Playa San Juan, El Cabo de Las Huertas, o cualquier barrio externo al centro, de los de mi ciudad y, seguramente las de muchas, son caldo de cultivo para los cacos que se dedican a desvalijar viviendas en esas zonas que por la concepción de su estructura urbana está habitada por gente que trabaja todo el día fuera de casa, él y ella, o por gente que solo la ocupa estacionalmente aprovechando nuestro clima. Así, en esos barrios, es fácil que entre gente en tu urbanización en las que, por su tamaño, nadie conoce a nadie, lo que facilita que luego accedan a tu escalera y vayan piso por piso llamando y enterándose de quien vive y quien no. Lo hacen cada día, son unos expertos, toman nota de todo, son como una especie de avanzadilla militar, levantan un plano de la habitabilidad y usos de cada casa y luego van a por ellas. Maribel que es un experta en estos asuntos, siempre que llaman les dice, lo siento estoy en la ducha y no puedo abrir, pero a mi vecino de rellano, que vive en Madrid, un día que estaba de visita en esta cálida tierra, de modo inesperado, le entraron en su casa dos muchachas de habla rumana con una radiografía y mucho arte, ante lo que el hombre reaccionó como pudo, mientras las chicas se dieron a la fuga con toda rapidez, tanta, que cuando se reanimó ya ni las vio salir por parte alguna de la urbanización.
Últimamente, por algo que todos podemos imaginar, estos robos se producen con mayor asiduidad, incluso más de lo normal, pero vivimos sin querer entenderlo y al parecer la administración de justicia tampoco. Pillan a una banda que se dedica al asunto en La zona de Cabo de las Huertas, argelinos para más señas, muy conocidos por la Policía, se les pilla con las manos en la masa, se les requisan teléfonos móviles, carteras y mil cosas más y el juez, a las 24 horas, los suelta, eso sí, con cargos. Me imagino lo que harán a continuación los componentes de la banda, tienen unos cuantos años para seguir delinquiendo y luego marcharse a otro país antes de ser juzgados, nuestra justicia es así, pero, por favor, hasta cuando de todo esto. ¿tenemos que seguir hablando de las pensiones y de si el ZP se presentará o no a las próximas elecciones?
Seamos optimistas y pensemos que alguien va a hacer algo por nosotros alguna vez. Me imagino una escena en el Congreso de los Diputados en el que se ve a los Representantes del Pueblo haciendo leyes que resuelvan la vida de los ciudadanos. Eso tendrá que llegar ¿Verdad? – Pues no nos desanimemos, tendremos que hacer algo para que eso sea posible, solo depende de nosotros.
PD: “Te veo muy guerrillero, últimamente, cariño ¿te pasa algo?” – Pues NO, bueno, creo que NO, a lo peor lo que me pasa es que encuentro a faltar la voz de la oposición, la voz de la injusticia y la de todos aquellos mansos que viendo como son, se resignan a serlo sin que nada de lo que les hagan les importe.
Parece ser que si es GRATIS.
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