Aún a riesgo de equivocarme, tengo la casi total seguridad de que he reparado todos mis males virtuales. No hay mal mas dañino que el que no lo parece por muy virtual que parezca. Comencé a notar que mi conexión a internet se ralentizaba, mas tarde que el acceso al router se hacía imposible y al final noté que la red interior de mi Wi-Fi casero no era accesible al mínimo cambio. Tras una semana de lucha y meditación sobre qué hacer, llevo toda la mañana recuperando aquellas identidades que me habían sido usurpadas al conseguir mi clave. Facebook, twitter y casi todas las cuentas de correo-e habían sido “mangadas” por algún caco virtual, una vez había tenido acceso a mis claves. Todo apunta a que la vulnerabilidad ha llegado a través del router de mi ONO-100 ya que la clave y usuario, tonto de mí, mantenía los de fábrica. Un error de principiante pero todo hace suponer que ha sido un vecino que se habrá “jartado” de ver mis fotos, mis notas y mis correos. No hemos conseguido averiguar quien, pero “fraude-internet” de la Policía está en ello. No se si lo conseguirán pero todo mal es bueno si para aprender algo sirve y en este caso, a mi, me ha ayudado mucho, no a desconfiar, qué también, sino a que no se puede bajar nunca la guardia y ante nadie en cuestiones de seguridad.
Por tanto y desde este mismo instante ya estoy descargando los correos-e antiguos, podré acceder a mi Facebook, a mi Twitter y a mi Blog sin problemas, por fin. También diré que, seguramente, quien haya cometido tal villanía debe estar muy preocupado pues las pistas dejadas no dejan muchas dudas de su procedencia, según me han dicho mis protectores, pero también diré que daño aparente ninguno. Ni ha escrito en mis Redes, ni en mis cuentas de correo-e, por lo cual hemos entendido que, o bien se ha asustado o bien lo ha hecho como una broma mas de mal gusto, y solo ha querido ver si mi ropa interior estaba limpia, al mas puro estilo de un DeLuxe televisivo.
El que tenga problemas con este tipo de ataques que no renuncie a nada, que no se asuste, ni cierre nada, solo cambiar claves y denunciar el suceso a todos los servidores de correo y administradores de Redes y Blogs y, ah, por cierto, si alguien poco amigo intenta entrar en “mis cosas virtuales” esgrimiendo alguna clave usurpada que se cuide, en menos de tres horas tendrá a la policía en su casa o en la del titular del IP de la conexión con la que lo haya intentado.
Os dejo un enlace a un artículo, uno de los mil que me han servido para recuperarme:
Bueno, aunque comprendo que es una intromisión en tu intimidad, menos mal que no han tocado nada. Es un consuelo. Celebro que estés con nosotros otra vez. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, EKK. Impotencia y.mucha rabia, así me he sentido. Pero conviene no decaer porque la primera actitud es mandarlo todo a .......
ResponderEliminarLa verdad es que da miedo si se para uno a pensar cuanto HLGP que hay suelto por ahi dispuesto a fastidiar a uno. Tomo nota de tu enlace "per si de cas".
ResponderEliminarMucho miedo e impotencia, argy. hay que ir con cuidado, pero solo eso.
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