Parcheando el destino gracias al sexo malo

Me emociona observar el fervor popular por el sentir de La Fe

24 diciembre 2011

Después de un pequeño parón estesinósico, del que me siento muy orgulloso y digo que me siento orgulloso y agradecido, pues gracias a él me he visto obligado a reflexionar sobre las prioridades de las cosas terrenales y sobre las otras, sí, esas que piensas que nunca llegarán a pesar de que el dichoso bar de la curva del que tanto hablo anda ya muy repleto y con ello empiezo a dudar sobre si habrá o no,  café para todos cuando llegue.

Prometí volver a sentarme aquí, ante mi frontón y regular y activar mis neuronas senso-sexuales de la forma mas asquerosa e impenitente que sé hacerlo aunque lo haga sin querer y como aquél que dice, mintiendo como un político el día de su boda, pues yo solo pasaba por aquí y, como muchos congéneres y grandes “compartidores de senilidad”, diría aquello que cita la letra de una de mis canciones favoritas:  “Yo pasaba por aquí y me cortaron los cabellos, me llenaron de temor, me obligaron a ser ellos, y me prohibieron ser yo.”

Por ello y olvidando algunos rencores bíblicos dirigidos a la especie humana, voy a hacer de este primera bloguería postestesinósica algún rendido homenaje a algunos de esos recalcitrantes amigos del dolor que han intentado acompañarme en esta verbena venida del sexo aunque esta vez haya sido del sexo malo:

1. Gracias a todos mis amigos del Facebook y a todos aquellos que se han ido a rezarle un par de novenas y un réquiem, (algunos), en la Concatedral de San Nicolás, al Cristo de La Buena Muerte como los Fernando´s, Aurelio, Antonio´s, Suso, Fran, Carmen, Benito, Ramón, La Diva, Joana, EKK, Rosy, Bucan, Candela, MPI, Mariano, Prado, argy, Reme, David, J.A., Pablo, Augusto, Mario, Marga, Carlos, Laura, El Misántropo, Ángel, Isabel, Alberto, Lucía, Charo, Jelio, Ana …………… y tantos y tantos más que se han interesado por mi herencia y que aquí no voy a mencionar por el bien de sus generaciones venideras, pero a todos, como dicen los artistas: “De verdad, si, de verdad, os quiero mucho”
2. Y, como sal al fuego, dejaré aquí una de las frases de ánimo, no anónimas, que mas me ha impactado en la oreja derecha, en la posadera izquierda y en el ventrículo izquierdo:
• Hola Enrique, pues soy una de esas que se preguntaba dónde estarías. Ahora sé que te quedan menos días para estar MUY BIEN ;-) y compartir tus relatos, noticias y pasión por lo que te rodea. Así que desde aquí y junto a todos los amigos que te han escrito, te mandamos una taza de ánimo, unas gotitas de sonrisas, y un abrazo de esos poderosos, que atraviesan las pantallas. ¡Ponte bueno! Es una orden. :-)

Feliz Navidad, amigos

 enriquetarragófreixes