La ausencia de varón no es un problema médico ……

Oído en el quiosco: Sin varones se vive mejor

24 julio 2013      -      24 julio 2016

Todos somos sensibles, aunque la mayoría hagan lo posible por vivir al margen de ellos, de la Casta,  a sus manifestaciones, claramente ideológicas, y sin darnos cuenta de lo que dicen y me refiero, por supuesto, a esa mayoría silenciosa de gente que piensa que como no puede entender al poder, ni al orden, ni al buen Gobierno, se dedica al libre albedrío ante la pasividad de cualquier autoridad de control por muy dura o imbécil que se ponga a la hora de sancionar determinados actos, dada la pérdida de credibilidad que el Poder, tanto el  Ejecutivo, como el Judicial, como el Legislativo, se ganan un día y otro también, dando la sensación, con sus gestos, de que todo está manipulado y si no es así, es lo que a la gente de la calle le/nos parece. Es como si lo que ellos hacen, los de  la Casta, no fuera con nosotros, pasamos de ellos. Unos se van de botellón, otros a trabajar a Lisboa o a Londres y los más nos emborrachamos en las tabernas de pedanías que por cinco euros te dan un cubo con 5 tercios.

Volviendo a la desgracia de este siglo, es decir, a los gestos de la Casta, ayer se le abrió un nuevo frente de debate a este “querido” Gobierno de nuestra querida Spain, cuando Ana Mato dijo: “La falta de varón no es un problema médico” y con ello a buen entendedor le basta para saber lo que quiso decir.

Ante ello y resumiendo lo oído por ahí, están los clásicos tres puntos de vista, que dicen:

1. Putas, lesbianas y maricones que los manden al infierno para que purguen sus pecados. Faltaría más que, encima, con mi dinero, les pagara yo un transexualismo o una fecundación asistida, coño, faltaría más.
2. Si hay libertad sexual o de sexo, no se puede obligar a una homosexual a practicar sexo indeseado para ser madre.
3. Cuanto daño hacen los que se apuntan a cualquier progresía, sean ellos o ellas, del color que sea, (que siempre son del mismo), para desanclar los clásicos tabús que, seguramente, en su juventud no les dejaron practicar y/o, todo lo contrario, eran acérrimos e hipócritas, defensores de la moral de la época y que ahora se escudan en esa humillante progresía interesada y partidista que tanto daño a hecho a la revolución de los amantes de la verdadera moral."

Bien, pues en eso estamos. Yo llevo un día apretadito con el asunto, sí, tengo amigos en todos los frentes y no sé que pensar, o sí, es decir, creo que sí, pero … ¿Y tú?

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