24 septiembre 2013
Miras a tu alrededor y no las ves o no sabes verlas, pero están ahí. Cada vez que veo un edificio bien puesto no puedo reprimirme, le hago una foto o me tomo mis minutos para apreciar su belleza, sus detalles constructivos, sus vicios y su naturaleza. Las raíces, mis raíces, quedaron para siempre en Pedralbes, en la Av. Gregorio Marañón, en esa coqueta Escuela de Aparejadores de mis amores. Como los toreros con lo suyo a mi cuando me preguntan, siempre, contesto: "Yo del ladrillo, si del ladrillo hasta la muerte".
Sean cual sean tus raíces, no importa, lo importante es sentirlas como si, realmente, aún existieran, eso te hace ser más feliz y mas digno ¿Verdad?
Enviado desde mi Note II
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Este blog comparte contenidos con otro de mis blogs a modo de copia de seguridad, el uno del otro, hasta el 24 de febrero de 2023
https://enriquetarragofreixes.wordpress.com/