07 noviembre 2013
Seguramente, aunque a mi me pirra, a los ortodoxos de la música por excelencia no les guste André Rieu por su recalcitrante interés en adornarse y adornar sus interpretaciones con concesiones populistas y escaso rigor en la vestimenta de su público a la hora de asistir a uno de sus multitudinarios conciertos. Tengo una gran colección de vídeos de Rieu de los que la mayoría los tengo porque me los mandó mi amigo Fernando, el de la sanjuanera Calle Arpón, todo un ilustre caballero. Ayer recibí otro de uno de esos amigos que, como dije ayer, parece que no están y no pude pasármelo ni mejor, ni más veces, viéndolo. Lo dejo aquí, no os lo perdáis si os sobran algo más de cuatro minutos para verlo, son esos momentos necesarios para poder seguir:
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Muchacho, te estás aplicando demasiado. Ya levitas. Un abrazo
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