04 septiembre 2016
Nunca supe como, pero salté el potro que era más grande que yo al grito de mi odioso foro escolar ... ¡gallina, gallina! ... y me rompí un brazo. Aprendí que eso de "Échale cojones, Enrique", era una estupidez. Tenía 9 años.
Durante una semana entera estuve haciendo chuletas sobre los temas de la asignatura de Latín. No fui capaz de usarlas en el examen pero aprendí que hacer chuletas es una gran manera de aprender. Tenía 13 años.
Tenía que subir la cuerda o no pasaría las pruebas físicas para mi entrada en el IPS, (antiguas milicias universitarias). Apuntaba maneras mi dormida DFEH pero le "eché huevos" y aún ahora no se como lo hice, pero subí. Al bajar, ya sin fuerzas, lo hice de un tirón y me quemé las manos. Me callé como un puta y solo cuando llegué a casa y sin que nadie nos viera, mi hermana me hizo una cura de apaño. Ese día descubrí que todo premio tiene su precio. Tenía 17 años.
En esta era emocional y hasta felizmente mía, un día en una fiesta de esas muy guatequeras y muy decentes, y al ritmo de "une mèche de cheveux", me enamoré de ella sin saberlo. Aquel día aprendí algo que nunca olvidé ... tenía y tengo, a pesar de mis muy queridos 67, mis incontestables 17 ... y ahí me quedé y que ahí quería quedarme siempre. Otro día intento seguir con el resto, ahora ... ahora ya no puedo.
Enviado desde S6+Edge
enriquetarragófreixes
Me enamoré de ella sin saberlo......mis incontestables 17
ResponderEliminarNo entiendo la última parte
sera porque recién me levanto y estoy dormida
Dale explicámelo
me encantó tu bello texto
"y ahí me quedé y que ahí quería quedarme siempre". He querido decir, querida amiga, que mi vida empezó a los 17 cuando la conocí y lo que hice fue una foto y la puse en la memoria, en la parte de mis sentimientos y ahí sigo, igual que entonces, como el primer día. Para ese amor, un amor para siempre, sigo teniendo 17.
EliminarUn abrazo querida poetisa.
Es mi ley de vida, el punto de locura que cada vez siento la necesidad de hacerlo mayor.
ResponderEliminarVaya, no sabía que tú también, amiga Tracy.
EliminarUn abrazo muy fuerte y suerte
Qué amor tan bello , Enrique. Qué afortunados sois y cuánta capacidad de amar porque ese tipo de amores no se regalan :)
ResponderEliminarBesos
Gracias, Celia ... eres un sol.
Eliminar