09 octubre 2016
"Te pasas la vida soñando con la jubilación para poder hacer lo que te de la gana y es justo al revés ... es cuando no puedes hacer nada. Yo ya no puedo hacer lo que quiera, Enrique, me sangra el alma por culpa de mis hijos a los que no veo desde Navidad y me sangra la punta de lo que exprime el orín por culpa de mi mal de males en la vejiga. Me quedan cuatro pedos y dos pecados por cometer ... y estoy en ello" ...
Durante algo más de media hora estuvo Pedro, ese chico de Oviedo que, a su veterana juventud, lame sus heridas en El Cabo de Las Huertas contando por todos los rincones donde venden una copa de Matusalén, (un Ron extrairdinario), sus males, sus desdichas y sus escasas alegrías, pero contradictoriamente y por encima de todo, Pedro al ser un buen y gran creyente de no sabemos que tipo de confesión pagana, nos alimenta la sensación y ganas de vivir porque su confuso y a la vez concreto, final, después de sus largas disertaciones, es el de aconsejar a todo aquel que le quiera oír que nada de quedarse en casa, ni eso de sentarse en un banco de la Playa a contar cuantas gaviotas pisan el culo en la arena, no, su mensaje al mundo es eso tan viejo de ... "No dejes que nadie lo haga por ti, embárcate, hazlo tú, no te pierdas nada que puedas hacer hoy y especialmente, por que te hagan".
Enviado desde S6+Edge
enriquetarragófreixes
Ay, tú y tus amigos me dais fuerzas. Gracias a todos.
ResponderEliminarBesos.
No necesitas fuerza, amiga Celia, tú eres la reina de internet, no hay más que ver la enorme cantidad de seguidores que tienes. Eres la envidia de todos querida artista.
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