25 junio 2017
Abrir los ojos, sentir el viento, el sol, el frío, el calor, el sutil encanto de un abrazo, de un reencuentro o de un simple y dulce, beso de amor. Las sensaciones son esas vibraciones que el alma siente cuando se enamora del viento y se va con él. Las hay buenas, malas y las que nunca se han podido sentir. A mi, hoy, me basta solo con una, quizás la única que debiera importar, la sensación de vivir.
A mí me gustaría marcharme con el viento, pero el que sopla en la madrugada que no hace daño ni quema, pero aún decide quedarse conmigo. Ahora siento que me quema y me hace daño, física y psíquicamente porque soy medio persona, pero sigo. Con temporales, tormentas, vendavales o brisas, sigo y siento, sentimos que vivimos. Gracias por hacérmelo recordar. Buen domingo.
ResponderEliminarGracias a ti, amiga Paz, recordarlo es vivirlo.
EliminarUn abrazo-e de domingo