Imagen del Blog de Antonio Campillo
31 julio 2017
Hace poco ya le escribí, hoy vuelvo a hacerlo, quiero que te enteres que nada tengo contra ti:
Te reías mientras repartías tus manos por mi cuerpo, sin darme cuenta aprecié que el viento ya no azotaba mis movimientos, ni el pecado era tan deseable, los gemidos han cambiado su origen y las sombras se van amontonando sobre las cejas de los sentimientos perdidos. Ni las risas, ni las historias de impenitentes orgías incumplidas ayudan a mantener la atención erecta, nada está perdido, ni logrado, todo es una falsa primavera en un mundo etéreo, vulgar y poco comprometido pero, extrañamente, feliz. Me empiezas a abrazar con trazos duros, gestos incomprensibles y mirada canosa, me haces ganar en respeto, pero me quitas dignidad, estilo y no se que más, sí, me estás poseyendo, amiga, me estás matando cada poco un poquito más, querida, si, me estás apartando la vida pero, a pesar de ello, te quiero nueva amiga, bienvenida amiga, bienvenida vejez.
Ya sabes, ella es así, contigo y con todos. Miramos para otro lado como queriéndola obviar, pero está ahí. Cruda y despiadada con unos y un poco más indulgente con otros, pero está. Iluso del que piense que nunca la va a conocer, que puede ser y de hecho es, pero llega. La quieres y...¡cómo! y ten por seguro que de una manera u otra aunque tengas motivos para pensar lo contrario, ella siempre te lo agradece. Un abrazo de principio de semana.
ResponderEliminarSiempre coherente, amiga Paz. Le contaba anoche a un grupo de jóvenes cuarentones que hablar de la vejez de modo despectivo y hasta grotesco es algo estúpido pues sólo se llega a ella con suerte, a veces, incluso, con mucha.
EliminarFeliz lunes compañera de bloguerías
Muy bien descrita amigo Enrique, pero tiene el lado positivo al cual nos debemos. la contemplación. el reposo, la ternura, la sabiduría, en definitiva la vejez en la vida es un premio y no un castigo, viva la vez!...Viva!!
ResponderEliminarUn abrazo
Así es, amigo Toni, aunque hay cosas para las que no conviene tener prisa en llegar.
EliminarUn abrazo mi cuasi inmortal amigo