29 septiembre 2017
Volveré a traer hasta aquí y atendiendo la insistente petición de mis deshumanizados y viejuznos amigachos de los cafés de madrugada del Ateneo de mis amores, el artículo o bloguería, (que es como a mi me gusta llamarle a esto de escribir textos cortos en un blog), que hoy he publicado en mi Wordpress sobre mi inevitable devoción de querer ser Romano de las Romas más imperiales y ancestrales, si es que me quitan el derecho a ser aborigen de toda la Tierra del Ibérico más sabroso, de la sardana, de las gaitas, del tocino, y de la taronjá, (naranjada escrita en valenciano).
Yo quiero ser de la Roma de los Césares … es mi derecho
Naturaleza: La naturaleza, en su sentido más amplio, es equivalente al mundo natural, mundo material o universo material. El término hace referencia a los fenómenos del mundo físico, y también a la vida en general.
29 septiembre 2017
- Notaba odio en cualquier lugar, personas contra personas enfrentadas por una bandera, un idioma o un fanático e inexistente canto a la libertad de quien no sabe lo que es no tenerla como muchos de los que nacimos en los cuarenta en la Iberia de los romanos.
- El poder político adoctrinaba a los súbditos desde su más tierna infancia en ese odio a lo ibérico, a lo inexistente, a lo absurdo, mientras ellos - los del poder político - vivían en la excelencia del beneficio propio de su generado odio popular.
- Los niños se fueron haciendo hombres y mujeres anclados en su doctrina dirigida al mundo del odio y empezaron a manifestarlo.
- Al grito de "QUEREMOS SER LIBRES", y sin saber lo que ya tenían, esos aleccionados seres se enfundaron la camiseta impresa en su identidad emocional del queremos ser lo que siempre nos dijeron que queríamos y debíamos ser.
- Un observador – fantasma descendiente de una Iberia Romana - puesto en pie en una imaginaria plaza de la Concordia de la más olvidada y ancestral Historia de la Iberia más Culta, dijo ... "Volo enim ut et Romanis ius est de Caesaribus" ... (Yo quiero ser de la Roma de los Césares) ... pues ese quiero creer que es mi derecho, y lo hago mío, quizás el derecho más antiguo de nuestra civilización actual. ¿Por qué no hacerle caso? ¿Su grito no es mucho más sensato, e históricamente culto, que el de otros que solo basan su equivocada vida ideológica en gestos históricos equivocados y recientes?
- Termino, como siempre, haciendo hincapié en eso que decía y dice, un buen amigo, mi olvidado Rafael, (qué hoy, por cierto, es su día), en el que describe que la Estupidez Humana no tiene límites pues es la única especie de este planeta - planeta que algunos seguimos llamando Tierra - que tiende a la autodestrucción.
Siempre me ha sorprendido comprobar lo sencillo que resulta lavar el cerebro de las masas adocenadas. Especialmente por parte de los nacionalismos. Tristemente la historia se repite. Buen artículo amigo. Un abrazo,
ResponderEliminarSiempre sorprende, amigo mimarzgz. La estupidez siempre creemos que es cosa de los demás.
EliminarUn abrazo fuerte
Muy bien escrito master... (aunque yo romano no quisiera ser... A veces ni pertenecer a los humanos!)...
ResponderEliminarPuede que yo tampoco pretenda ser romano, amigo JLO, pero puestos a reivindicar nuestro origen a base de anclarla en una parte de ella, yo me pregunto: ¿Y por qué no en la era romana ... o en la de piedra? ... por ejemplo.
EliminarUn abrazo amigo de ultramar.