Pintura de Miguel Avataneo
02 enero 2020
- Cuando era niño creía que con el Año Nuevo comenzaba una nueva vida, nuevas aventuras, nada de lo hecho hasta entonces servía para nada, ahora tocaba empezar otra vez, sí, era como volver a nacer.
- Pasaron los años, cumplí los trece, y comenzó a ser decepcionante, año tras año, nada cambiaba.
- Pero llegaron mis felices diecisiete y comencé a darme cuenta de que, aún y desnudo, lo que pensé de niño era una ambigua realidad, sí, todo era posible pero me faltaban medios.
- Los veinte me dieron la razón aunque no los medios, pero tuve la suerte de los escogidos ... esfuerzo, formación y sueños, hicieron que todo pareciera posible y así fue.
- Los treinta, los cuarenta y los cincuenta, me dieron la posibilidad de navegar en grandes buques y abordar un mundo repleto de generosos puertos.
- Los sesenta y ahora, quizás aún más, los setenta, me dan lo que no sabía que tenía ... ahora lo tengo todo.
- Ser feliz no es fácil, saber que lo eres, tampoco.

que bueno entonces que la idea es que uno sepa que es feliz y que no necesita tanto... ahora a mis 50 tengo que llegar a ese estado entonces, gracias master... feliz año y nos seguimos leyendo (y en mi caso aprendiendo acá)... abrazo grande
ResponderEliminarGracias JLO, me parece que el máster eres tú.
EliminarUn abrazo fuerte
¡Claro que no es fácil!, anda que no lo tienes que pelear...
ResponderEliminarDicen, querida amiga Tracy, que la sabiduría se deja ver en la vida del hombre de un modo inversamente proporcional al tiempo que le queda por disfrutar de ella.
EliminarUn abrazo de primer sábado del año.