¿Hacemos un pre encuentro, hoy antes de comer, y hablamos de las cosas informáticas? – Así me he encontrado hoy con mi ídolo de juventud, con Benito. ¿Y quien es Benito? – Bueno, el no es amante de la publicidad ni de salir en los medios, por muy modestos que sean y por tanto no se prodiga mucho en dar informaciones muy a pesar mío.
Le conocí en el 54 y él era el mejor portero de fútbol del mundo, (había sido campeón del mundo juvenil con la selección española de la época), y él, cuando yo solo babeaba, él ya estaba ahí, debajo del arco de una de las porterías del santuario de La Carretera de Sarriá de mis amores. Buen deportista, buen jugador, buen entrenador, buen secretario técnico y aún mejor amigo. Hace mas de veinte años me lo encontré en mi mesa, comiendo conmigo, del brazo de Balasch, me emocioné sin poderlo disimular, pero el caso es que hoy, después de tantos años, sigo haciéndolo.
Benito habla de sus cosas, de su Marisol, de sus hijas, de su yerno, de sus nietos, y lo hace con tanto amor que consigue emocionarme, pero si además te da un poquito de eso que tanto cuesta que él regale, pues entonces, vuelvo a sentirme vivo. Gracias Benito, contigo siempre podré aprender a ser mejor persona. Hoy me has dado una lección de iPad y de ganas de vivir que nadie como yo podrá apreciar tanto.
Lo recuerdo de su época de entrenador del Hércules,,,,,,,,la verdad es que siempre les he visto un parecido a mi padre y a Benito.
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