Dos aspirinas, un orgasmo y un ataque cardíaco

24 febrero 2011

Un buen amigo me manda un pps en el que me dice que cuando tenga un dolor muy  fuerte en el brazo izquierdo y me sienta desfallecer, pues nada, que me tome dos aspirinas, que las ponga debajo de la lengua y todo eso que se dice siempre, y que salga zumbando para el hospital. Habré tenido un infarto o cosa parecida y con las aspirinas mantendré el motor central en marcha hasta que llegue el taller hospitalario. Pues bien, como siempre me gusta confirmar casi todo lo que leo y veo que me interesa, me he puesto a buscar por La Red y lo que mas me ha sorprendido es que casi todo el mundo ya sabe el asunto de las aspirinas y su noble función de administrar la vida en los casos que afectan a las enfermedades del corazón o coronarias, pero lo que no tenía ni idea es de que tuviera un efecto parecido, el de las aspirinas, la cosa orgásmica. Leo un artículo, del que hay varios que dicen lo mismo o parecido y por su procedencia parecen totalmente ciertas que: Un orgasmo equivale a dos aspirinas contra el dolor de cabeza.

Bien, desde ahora, y eso va por los mas machitos y machitas, no se os ocurra contar aquello de: “Tengo un horrible dolor de cabeza”, porque sabremos cuales son vuestras carencias. Por otra parte, la pregunta de hoy sería: “¿Un buen Orgasmo espabila y resuelve los defectos cardiovasculares y coronarios?”

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