22 junio 2011
Si lo de de la Heladería de Antonio ha tenido su espacio emocional, esta mañana en mí, mucho más la ha tenido la cosa de recorrer una vacía estancia Festera, la de mi barrio, esta misma mañana, también. Miles de recuerdos me acechan, Plaza América con María, La Celaya y su queridísimo Pablo Ortiz, la de “les palmeretes” con Pepín Alonso y su Esperanza, todos los niños, aún muy pequeños, dando gracia al cercado barraquero, con música pachanguera, claro, un conjunto al estilo de la Sonora Dinamita y un amigo pasado de copas que te dice que te quiere como nunca a querido a nadie, eso no se puede olvidar. La madre de los mas mayores aportando “tupervares” con los mas típicas joyas culinarias de la tierra que te hacen beber hasta Navidad, como mínimo, salazón del bueno y jamón apelotonado, da igual, todo sabe a Hogueras la fiesta por excelencia Alicantina, bellos recuerdos de esa tradición que tanto me gusta en los pueblos y comarcas en las que he vivido, golpe a golpe, por culpa de mis inolvidables éxodos profesionales. Esta, la Terreta, es la que mas me ha dado, por no decir que me ha dado casi todo.
Aquí he encontrado amistad y fortuna, que no dinero o, al menos, eso que le llaman tener dinero, he desarrollado mi parte principal, la de mi profesión y nunca he disfrutado tanto como aquí. Como los artistas, aquí me he realizado, esta es una tierra de amor y soledad, de paz y de juerga, de vida y muerte, de pasiones y desdichas, aquí lo hay, lo hay y bueno, hay de todo, hay vida y mucha luz, no hay mala leche, solo hay “semenfotismo”, (una especie de gesto de como aquél de que le da todo igual pero que no es así), una medicina especial para evitar las hipertensiones arteriales y la vida con sufrimiento, aquí no hay horarios, ni fecha en el calendario que te obligue a nada, esto es una tierra donde lo mas importante es vivir al día, vivir del ingenio y de la creatividad, pero no para amarrar fortunas, nada de eso, solo se obtiene para vivir mejor, para disfrutarlo en fiestas, en casas con lucecitas, en un Mercedes último modelo y en aparentar disfrutarlo, eso es la vida de aquí, aquí el asunto de “hacer fortuna” solo sirve para disfrutarlo, para gastarlo, y eso, esa forma de ser, es la que tienen mis mejores amigos, todos viven la vida que les dejan vivir, se quejan pero de vicio, viven de pura madre pero no estropean el día a nadie, cuando te descuidas ya te han puesto otro cubata o te hacen una proposición deshonesta para irnos juntos a los bajos de la Albufereta o a la barra de la Barraca de al lado que hay una señora que se las come a topos, todo eso mientras la mujer y los niños se lo pasan decentemente en la Barraca bailando la pachanga y los pasodobles festeros de turno.
Esos son mis amigos y mis fiestas, pero no todos son así, los hay que se lo pasan de cine, también, beben, comen y saltan todas las noches de Fiesta como posesos, tengan la edad que tengan, todos son una piña, ya no hay enemigos ni guerras políticas, solo fiesta, familia y tradición en los espacios mas recordados de mi ya alejada juventud, que no añoro porque cada cosa tiene su tiempo, pero que perdura en mi memoria, en la de aquél que la recuerda para contarla, tradición y familia van unidos en estas fiestas tan nuestras y yo, y muchos más, no las queremos olvidar, no es solo un polvo de verano, es mucho más, es el amor a la tradición puesto a disposición de la imaginación de un pueblo y ahí, si ahí, ahí me quiero quedar.
"Les palmeretes",,,,,,,que recuerdos de infancia, junto al Barrio de San Antón, el "carreo" la barraca "Xe lo que faxa falta"...aún me acuerdo de su himno: "xe lo que faxa falta, no patirem de res, y si mos fera, ancara tenim de mes" (maromenos). Recuerdos imborrables que me trasladan a esa època en que el tiempo parecia no pasar, todo lo contrario de ahora. En fin!
ResponderEliminarFelices Fiestas mon amie!
Si, grandes recuerdos, amigo argy. Eso es lo que nos gusta, recordar para seguir viviendo. Felices Hogueras, amigo, y ojo, que aún queda mucho, hay que dosificarse.
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