Un drama verbosensoemocional

29 diciembre 2011

Ha sido muy duro, ver a Pepe pelearse con Doña Leonor sobre el tamaño y calidad de los males de cada uno, no tenía desperdicio. Era como la pelea entre dos niños cuando hablan de las virtudes de “su papá”. "Que si “a mi me duele tanto que ya no soy capaz ni de explicarlo pero al menos no me quejo como hace usted, Pepe”, decía la una, pero Pepe, que hoy estaba enganchado a su iPad como nunca, hacia como que no le hacía caso a la vez que nos decía, “Mira por donde, esta niña se ha vuelto loca o miente como todos los del PP cuando dice que A partir de junio habrá un superávit, en las cuentas del Ayuntamiento, de unos 30 millones de euros.” Pero Doña Leonor no estaba dispuesta a cejar en el intento de conseguir que sus escrotos fueran zarandeados, los de Pepe, y  le insiste: “Pepe, como puede Usted decir que sus males son mayores que los míos si Usted siempre ha sido sindicalista y no ha pegado un palo al agua en su vida, además, ¿quien puede hoy jubilarse a los 56, como hizo Usted hace ya diez años? Usted no sabe lo que es un dolor. A mi …….” y ya no cuento lo que ha dicho pero Doña Leonor le ha contado, (nos ha contado), todo lo suyo y con detalle hasta que a Pepe se le han llenado, al menos, un saco escrotal y le ha dicho: “ya está bien Doña Leonor que, aunque tenga Usted casi 90, eso, no le da derecho a ponerme a mi de vuelta y media tan solo por haber sido excomulgado de la vida laboral cuando aún otros pueden o podían,  desarrollarla con normalidad. Yo dejé mi salud para que este país esté don de está y …….” y Pepe, haciendo uso de sus dotes verborréicas adquiridas durante su etapa seudosindicalista, ha estado casi diez minutos hablando de que sus males son psicológicos, que le torturaron en los sesenta y que la policía de Franco no le mató de milagro. 

Pero en pleno drama verbosensoemocional ha llegado Antoine, que llevaba ya una media castaña impresionante,  tatareando lo de Feliz Navidad mientras hacía ver que bailaba algo que no tenía nada que ver con la compostura humana y sin que nos diéramos cuenta le ha muescado un “muerdo”, en plenos morros, a la Loli que nos ha dejado a todos perplejos a la vez que la Loli le ha dicho en tono de pareja pero de la GC: ¿Y tú de donde vienes? y el caso y lo mas cachondo, es que el tío va y se lo cuenta y con detalle y, claro, aquí no lo voy a explicar pero el cachondeo ha sido tal que han empezado a salir botellas de cava por todas partes y esos dulces que siempre tiene la Loli debajo del mostrador hasta que Doña Leonor, que ya maneja el iPad como nadie, nos ha puesto esta canción que nos ha dicho que le pirra y que ella bailaba ya de mayorcita, pero que con ello y con ella, los volvía locos a todos ….

La vida es esa cosa que pasa mientras nos dedicamos a otras tonterías, si, ya lo sé, pero esos irreales ratos de realidad que formalizo siempre que puedo con mis amiguetes cafetulianos son momentos impagables, emocional y visceralmente impagables, son tan necesarios como el mismo trabajo, el amor y/o la salud. Yo, hoy, no lo cambiaría por nada del mundo, y el caso, como ya digo siempre, el caso es que casi me lo pierdo. hace unos pocos años, no sabía ni que existía.

Un abrazo amigos y ojo, ir preparando la bolsa que hay que salir a por uvas, no sea que en Nochevieja nos quedemos sin. Yo, por si acaso, me voy ahora mismo a buscarlas y si no las encuentro hoy, lo intentaré mañana. Feliz Noche.

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