La deliciosa sensación de estar y sentirse vivo
Los veía disfrutar de la charla, de las viandas y hasta de la conversación. Amigos todos, seres queridos y algo más, estaban dejando el alma en saber hacernos felices y en hacérnoslo entender, unos a otros. Al recordar como nació mi hijo se me han saltado esas inoportunas lágrimas que hacen que piense que cualquier tiempo pasado fue el que fue para que el presente sea mas feliz, aún, al recordarlos. Ellos hacían lo mismo, contaban con cierta nostalgia sus vivencias, sus muchos ratos felices y la feliz experiencia de haber sido padres y ahora abuelos. Tiempos distantes y distintos, todos felices, es navidad y todos queremos creer que la vida es algo tan grandioso como lo es la felicidad que supone haberla vivido y seguir haciéndolo a su tiempo y al modo que ella nos ofrece. Solo es feliz el que puede y quiere, todo junto, hacerlo por separado nunca fue una buena idea y hacerlo con quien comparte tu vida y tu amistad es un placer de dioses o, simplemente, de viejos amigos.
Hacer lo que aprendimos de nuestros ancestros no es una virtud, en estos tiempos debiera ser una obligación.
Me apunto a tus deseos.....
ResponderEliminarGracias amigo Antonio, pensamos lo mismo.
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