23 marzo 2023
- Era, fue, una lucha sin cuartel. Estudié como un iluso, trabajé lo que creí era imposible, luché como un espartano para llegar a mi objetivo.
- No tuve tiempo de enredarme en luchas inútiles, ni de rezar como debiera, ni de mirar hacia atrás, solo hice lo que era necesario para llegar hasta donde me propuse.
- Llegué y una vez allí, ya era tarde para hacerle la pregunta que requería una necesaria respuesta.
- Miré al cielo y exclamé... "Papá: Ya llegué, te lo prometí. ¿Y ahora qué? ".
- Aún hoy, sin que sepa por qué, me lo sigo preguntando y no hay una respuesta fácil, solo el tiempo transcurrido ha sido capaz de hacérmelo entender, pero en mi alma quedó una herida imborrable ... "Papá, que cruel fue llegar y que ya no estuvieras para contártelo, para agradecértelo ... y es que las palabras nunca alcanzan, ni saben llegar a tiempo, cuando desbordan la capacidad del alma".
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N: En recuerdo de aquél querido viejo que tanto me apoyó y supo hacer de mi (como a Él le gustaba decir), un hombre de provecho.
Hay personas que extrañamos cada dia y que gracias a ellos somos mejores. Te mando un beso.
ResponderEliminarAsí es, amiga Judit, cada día más.
EliminarUn abrazo,, escritora
Tú sí que desbordas la capacidad del alma con esta confesión -que parece propia- tan relevante y ajustada a otras que muchos podríamos de una forma u otra contar, Enrique.
ResponderEliminarY nos acercas a tí, a tu mundo humano, a apreciarte amigo, de una forma sencilla y desbordante.
Ojala ese padre hubiera podido comprobar la persona que eres. Ojalá.
Inmenso abrazo.
Gracias, Teo, escribir consuela, ya sabes, escribior es un frontón al que le mandas tus emociones y lo haces, seguramente, para que te las devuelva. Ayuda mucho, escribir no es un acto de vanagloria, aunque quizás lo sea para algunos, es una forma de hablar con uno mismo sin rencor.
EliminarEn fin, Teo, gracias por tus comentarios, ayudan y mucho.
Un abrazo.
Hay cosas que me hubiera gustado compartir con mis padres y siempre me sabrá mal que eso no haya sucedido.
ResponderEliminarTambién es cierto que algunas mejor que no las hayan sabido.
Saludos.
Estoy de acuerdo contigo, TS, algunas no debieran ser contadas a los que nos dieron la vida.
EliminarFeliz viernes, compañero.
Éramos más maduros y adultos a los quince años que muchos de los que ahora tienen cuarenta.
ResponderEliminarEstudiamos, trabajamos y cuidamos a nuestros mayores porque sabíamos lo que era el deber, fuimos y somos solidarios porque es el único modo de construir el mundo. Nuestros padres estaban orgullosos de nosotros porque hicimos del respeto nuestra bandera.
Un beso.
Me pongo de pie y te aplaudo, Ilduara, eso creo yo también. Lo peor es que regenerar la sociedad actual, me parece una causa perdida.
EliminarUn abrazo.
Bello homenaje si los hay, porque creo que eso es lo que refleja esta entrada. Tu padre, desde algún lugar estará, muy orgulloso y agradecido por tus palabras.
ResponderEliminarEsa frase de Cortázar es inconmensurable.
¡Feliz finde Enrique!
Hablar de mis Padres, siempre me emociona, dulce Lu, ellos vivieron y sufrieron una guerra y una enorme y dura postguerra y a pesar de todo nos sacaron a los tres adelante. Lo dieron todo por nosotros y después por sus nietos.
EliminarFeliz sábado.