Fotografía de Frank-Ringo Gutacker
26 octubre 2021
- Era temprano, muy temprano, me quedaba una hora para el desayuno de las siete. Me quedé conmigo y empecé a elucubrar:
- Me puse a meditar sobre la dificultad que hoy se le presenta a los padres para escoger o decidir, que tipo de educación deben proponer a sus hijos y que parte en ello tiene la suerte, las malas compañías y/o las malas praxis que el día a día ofrece a esos jóvenes inconformes, inmaduros, que solo les preocupa cualificarse por el número de likes en sus redes sociales y que, en muchos casos, nunca han conocido la educativa miseria que ofrece la necesidad.
- Llevamos dentro de nuestra humanidad ausente, una falsa intención que nos viene de las praxis decadentes de los políticos o viceversa. Al final, nos parece todo decadente y corrupto, pero no es verdad, solo es lo que parece, que a los efectos inductivos es lo mismo, pero habrá que creer que la gente volverá a un mundo laboral, social y profesional donde la dignidad, la honestidad y la fidelidad sean valores altamente reconocidos en la era que viene… o debiera venir.
- Parece que vivimos en una Sociedad donde todavía se quiere vivir en la decadencia de un modelo de vida que ya no se sostiene. Religión, Contrato y Familia, son los puntales de nuestra civilización actual, no hay mas que analizar el estado de salud de esos puntales para darse cuenta de ello.
- No obstante, seguiré pensando que el mundo tiene arreglo, y como me decía ayer Mar, mi bancaria amiga, “da gusto convivir contigo y con tu buen humor de siempre”. Le he asegurado, jocosamente, que cualquier día me veo el GH, una serie turca-tv, el SálvameTv y hasta algún DeLuxe televisivo. ¿Pero qué es eso?- me dijo Mar - Entonces estás casi como yo, Mar: No sabemos de nada.
- Y se pasó esa hora y yo seguía vivo, entero, menos decadente, más despierto, menos preocupado, ¿qué fue lo que hice? … me gustó conocerme, me gustó hablar conmigo… el gusto es mío. Quizás mañana o pasado mañana o … algún otro día, vuelva a escucharme.
Hola Enrique.. Es bueno, es importante tener tiempo para los pensamientos, para conversar con uno mismo, deberíamos de disponer de unas horas diarias para escucharnos nosotros mismos.
ResponderEliminarA mí también me da la impresión que cuanto más redes sociales, más TV, equivale a menos educación cívica. Es una lástima como me ocurrió ayer mismo contemplar a una señora mayor, muy delgada con un gorro que le cubría la cabeza calva, los ojos hundidos y los labios secos, probablemente por los efectos de un tratamiento de quimio, ella de pie en un vagón del metro, mientras los asientos los ocupaban por completo los jóvenes todos ellos con su teléfono inteligente, sin levantar la cabeza. Hay veces que tengo vergüenza de lo que me rodea.
Un abrazo..
No sabes, Llorenç, como comparto contigo esa sensación y ese mismo ejemplo que no es solo en un transporte público, es en todas partes. Body y Likes, esos son los objetivos a perseguir hoy.
EliminarVivamos mientras nos dejen, Llorenç, feliz tarde.
Enrique, amigo, es bueno quedarse a solas con uno mismo. Es una opción, que los que tenemos una edad hemos aprendido con el paso del tiempo. Vivimos en una sociedad asolada por la prisa y una falta de comunicación enorme.
ResponderEliminarLas máquinas han invadido nuestra privacidad. Nos han arrebato el placer del diálogo con el otro.
Los padres lo tienen difícil para educar. El modelo familiar, nada tiene que ver con el de antaño.
En algunas cosas, nuestra sociedad ha avanzado, pero en otras ha retrocedido.
Pero pienso como tú. El mundo tiene arreglo, claro que sí...
Hay gente joven maravillosa, con la que me relaciono, que recogerá el testigo.
Abrazos.
Me alegra sentirte esperanzada, Maripaz, yo tengo cinco nietos y lo vivo a diario ... es muy difícil educarlos, pero seamos optimistas.
EliminarUn abrazo fuerte.
Es una sabia decisión la de hablar con uno ,ismo, hay que frecuentar esa copaía.
ResponderEliminarLo intentaré, Tracy.
EliminarHay que reír para no llorar. Yo creo que a pesar de todo hay que ser positivos. Te mando un beso.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo contigo, Judit. Siempre positivos.
EliminarUn abrazo, escritora.
Hola Enrique
ResponderEliminar¡pero que bien eso de hablar contigo mismo y que "el gusto sea tuyo"!
Nada es definitivo amigo...Sigo apostando a que el mundo tiene arreglo.
Sigo apostando a la inmensa mayoría de jóvenes, a los que no se ven porque no son notica pero sé que los hay y muy buenos.
Pero ya lo he dicho en mi blog y en otros. No se puede poner la responsabilidad en la juventud pues ellos fueron criados por quienes hoy son adultos y prefiero preguntarme entonces que modelo tuvieron.
Por suerte "hay de todo en la viña del señor" y yo -repito-apuesto a la buena gente, a la que abraza, a la que escucha, a la que mira a los ojos.
Y, a propósito de abrazo, va el mío aunque sea virtual
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EliminarHola Lu. Tengo cinco nietos y el mayor tiene 14. Espero y quiero creer, que tienes razón.
EliminarUn abrazo fuerte.
La reflexión personal es necesaria, o por lo menos gratificante cuando se da conscientemente.
ResponderEliminarNo voy a entrar en el tema de la educación, si bien lo conozco en general, como todos.
Me quedo con algunas frases tuyas. Creo que son explícitas por si solas.
"...la educativa miseria que ofrece la necesidad."
"...la gente volverá a un mundo laboral, social y profesional donde la dignidad, la honestidad y la fidelidad sean valores altamente reconocidos en la era que viene…"
"...¿Pero qué es eso?- me dijo Mar - Entonces estás casi como yo,"
Abrazos amigo. Siempre tan lúcido!
Gracias, Ernesto, tú siempre tan noble y oportuno.
EliminarUn abrazo fuerte
Mediante la instrucción se capacita o adiestra para que el individuo esté en posibilidad de realizar un tipo de trabajo específico. ...en cambio La educación
ResponderEliminares un proceso social de valores normativos que nutren la formación integral del individuo y su función es impulsar y desarrollar la actuación o conducta social del ser humano. Nunca me cansare de leerte.
Gracias, querida Mucha, casi me sonrojo.
EliminarTu comentario esde una brillantez que alumbra este modesta lágrima de interminables palabras.
Un abrazo, poetisa de América