04 marzo 2023
- Anoche, en pleno disfrute de las conferencias de los viernes la nuit, donde la amistad, el copeo fino y algún tango bien representado se pone a tiro de los bailongos que aún pueden estirar su esqueleto, uno de mis compañeros de la noche (un Elchero de Elche, político retirado y, como tal, gran conversador de la nada), me preguntó sobre como veía el futuro inmediato y lo hizo aludiendo a eso que algunos llaman el otro mundo. Mal momento y mal lugar - pensé- para hablar de un asunto en el que nadie puede afirmar poseer la verdad absoluta, pero le contesté como hubiera o habrá hecho él durante toda su vida a los votantes: "Hace ya demasiado tiempo que descubrí que ansiar o adivinar sobre la llegada del futuro, por próximo que pareciera, era un error de novatos … o de ilusos” – Y cuando terminé de decírselo, sin decírselo, me pregunté sobre cuándo y a qué edad, se aprende a valorar el hoy … ¿o es solo un problema de condición, edad y estado saber apreciarlo y al margen del calendario de cada cual?
- A la incontestada autopregunta me respondió, sorprendentemente, mi ángel de la guarda sin saberlo cuando, cogiéndome de las manos, me dijo: "No te levantes, hagamos como los jóvenes, vivamos cada momento, cierra los ojos y baila conmigo con la imaginación, Jaime va a poner nuestra canción". (una de las nuestras)
Cómo escapar a ser felices. Los bares, los café que frecuentamos son nuestros palacios de felicidad, por en eso en tus palabras "...vivamos cada momento..." Desde este aprecio colombiano. Carlos
ResponderEliminarEs fácil vivir, querer vivir, pero nos cuesta entenderlo. Es curioso que las ganas de vivir (al menos en mi caso) es inversamente proporcional al tiempo que nos queda por hacerlo.
EliminarUn abrazo, Carlos.
Vivir es una desición que requiere fuerza,convicción,valorización,no tiene que ver con juventud,si no con la convicción del como queremos,de la mirada frente a lo cotidiano o especial que creemos merecer.Buenisima entrada Enrique,me llevaste a pensar en como lo estoy haciendo y creo que debo hacer varios cambios.Te dejo un abrazo inmenso!
ResponderEliminarMe alegra saberlo, Menta, afrontar el día a día y su realidad es una lucha que hay que ganarla sea como sea. Yo lo intento y aunque no siempre lo consigo, no debo quejarme, aprendía a apreciar lo que tengo por encima de lo que deseo.
EliminarFeliz domingo.
Hagámoslo,
ResponderEliminar¡Ya!
EliminarFeliz domingo, Tracy
Uy que lindo relato me ha emocionado en especial el final y si hay que vivir con plenitud e imaginación. Te mando un beso.
ResponderEliminarEres un ángel, Judit.
EliminarGracias.
Feliz domingo, escritora
Supongo que no hay que obsesionarse y vivir, simplemente, que no es poco, el dia a dia... Lo demás vendrá solo...
ResponderEliminarUn abrazo, amigo
Así es, amigo Ildefonso, ya vivimos jugando en la red.
EliminarUn abrazo, maestro de la fotografía.
Tienes un ángel de la guarda magnífico.
ResponderEliminar:)
Saludos.
Sí, TS, ya son 56 años juntos con el ángel de mi vida.
EliminarFeliz domingo, compañero.
Por aquí solemos decir cuando se llega a cierta edad, y cometemos algunos excesos en aras de disfrutar de lo que no pudimos tiempo atrás de nuestra vida, decimos: "que nos quiten lo bailao"... no merece la pena perder el tiempo pensando en ese error al que tu le llamas de novato o iluso, y más, cuando somos consciente de que estamos en el ocaso de nuestras vidas.
ResponderEliminarPrecioso tu relato, amigo Enrique, y lo has bordado con ese ángel de la guarda.
Un fuerte abrazo.
Gracias, Manuel, eres siempre capaz de plasmar tu sensibilidad en tus letras.
EliminarGracias.
Feliz domingo.
No estoy segura si es un problema de edad, más bien de comprensión de lo efímero que es la vida. Los jóvenes disfrutan como si las vida se les fuese en el segundo. La viven. Me voy por el lado de sentir que cada persona tiene su momento de comprensión y, en ese momento cada: baile, beso, caricia y mirada es de una importancia maravillosa.
ResponderEliminarAbrazos desde mi amado Chile. Como ves amigo Enrique, tienes un amigo colombiano y una chilena.
Sí, Tatiana, también tengo argentinos, mejicanos, peruanos ... este es un mundo que cada vez es más global, para lo bueno y para lo malo, a mi me ha tocado lo bueno, siempre.
EliminarMe quedo con tu... "baile, beso, caricia y mirada es de una importancia maravillosa."
Feliz domingo
Yo pienso que, cuando nos vamos haciendo mayores es cuando más valoramos el hoy, hay que disfrutar cada momento.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Así debiera ser, Conchi, no sé si todos mis congéneres hacen o piensan lo mismo. No entiendo como la gente puede aburrirse, cuanto tenemos más de medio mundo por construir y conocer.
EliminarFeliz domingo.
Hola Enrique. No me agobio, y me agrada comentar en tus entradas pues me agrada lo que leo. Sólo que ya ves, llego a comentar cuando puedo. Todo bien amigo.
ResponderEliminarVamos a esto de "vivir cada momento" Así es. La vida es finita, y tantas personas no llegan siquiera a la adultez.
Y, ya lo he dicho, no es que vaya a ser nuestro último día porque somos mayores...NO.
Lo va a ser cuando tenga que ser.
Para no extenderme en un caso (uno más) que me tiene consternada te paso un enlace y te invito a que lo leas
https://www.eldiariodelfindelmundo.com/noticias/2023/03/03/100264-la-turista-belga-finalmente-fallecio
26 años tenía!!!! ¿Se entiende porqué digo que la finitud de la vida no tiene que ver con los años que uno/una tenga?
Entonces, como dijo Ghandi: “Vive como si fueras a morir mañana; aprende como si fueras a vivir para siempre"
Y para no seguir "usurpando espacio" :) :) cierro diciendo que ¡me encantó ese ritmo "bachatango" que nunca antes había escuchado!
Abrazo, ¡feliz domingo!
Gracias, dulce Lu, a mí me gusta leerte, eres bondadosa, amable, defines tu contenido con estilo y nunca para salir del paso. Eres una chica de comportamiento-e ejemplar.
EliminarEse bachatango, lo bailaba yo con mi niña cuando podía mover las piernas con relativa facilidad y de eso no hará tanto, unos cinco años.
Un abrazo fuerte, dulce amiga Lu.
Cuando suena vuestra canción el tiempo se para, no hay ayer, no hay mañana, sino el verdadero ser en un instante.
ResponderEliminarUn beso.
Eres magnífica, Ilduara. Sí se para, para recordar que seguimos ahí, juntos, y para recordar aquellos tiempos, no hace tanto tiempo, en que yo la podía bailar.
EliminarGracias.
Feliz lunes, Ilduara
También los jóvenes tienen cosas que enseñarnos y muchas.
ResponderEliminarSí, amiga Tracy, aprendimos, especialmente, de cuando lo fuimos.
EliminarFeliz lunes.
Leyendo la crónica de tu viernes la nuit, y atendiendo a tu pregunta sobre valorar el hoy, entre nuestra juventud del ayer y la realidad del hoy, surge el hecho de, en tu caso y en el de tantos, de contar hoy con ese ángel de la guarda.
ResponderEliminarQue si bien se llama igual, no creo que sea al que nos referíamos en nuestras oraciones de niños... :))))))
Abrazos Enrique.
Quizás sea el mismo, Ernesto (el mismo ángel), solo que se le cambia la cara, el alma debe ser la misma. Mi Madre solía decirme, cuando yo le preguntaba si estaría conmigo toda la vida, "sí, hijo, sí, cambiaré mi cara y mi cuerpo, pero siempre estaré ahí contigo".
EliminarFeliz y tranquilo lunes, Ernesto.
Que tierno y hermoso final le das a tu relato, y que bonito sería llegar a sentir ese abrazo de baile con la melodía de los recuerdos.
ResponderEliminarCreo que se comienzan a valorar los momentos cuando uno se da cuenta que por la edad, ya cada vez quedan menos...
Ojalá la ilusión no nos faltara nunca, pero la verdad es que cuesta mantenerla en el día a día.
Un abrazo Enrique y que todo lo bueno te acompañe siempre y sigas regalando tus estupendos escritos para deleite de tus lectores. Feliz semana.
Gracias, Elda, eres muy amable, pero es cierto, quizás no haya sido tan feliz en mi vida como ahora en el que voy descubriendo que mantenerla y vivirla ha sido un regalo y que sigue siéndolo.
EliminarUn abrazo agradecido.