jueves, 16 de noviembre de 2023

El desencanto de nuestros jóvenes, la incomprensión generacional acentuada y el fracaso de la Sociedad que nada resuelve

16 noviembre 2023

Hace algo más de once años, publiqué aquí un post que una vez he vuelto a leer, me resulta difícil seguir creyendo que todo siga igual si no peor.



02 noviembre 2012

- Esta mañana, cuando como un zombi, tras mis ya irremediables golpes de tibia contra la esquina de la cama, iba en busca de mi primer café, pues la noche y las noticias de mi auricular radiofónico no me han dejado dormir, me he sentado a meditar sobre aquellas calladas quejas que mi querida Paquita me trasladaba con sus ojos cuando yo a mis más de 18 llegaba a casa de madrugada (en esa época llegar de madrugada era llegar algo más tarde de las doce), por la razón que fuera, si, bien lo fuera por un partido de fútbol, por una noche de marcha de la época o por una cena en casa de la futura reina de mi vida. Mi Madre nunca dormía cuando yo llegaba tarde y esa cuestión, al parecer, no ha cambiado. Hoy toca darles un abrazo a todos esos padres, miles de ellos, que, a altas horas de la madrugada de la noche anterior, andaban por todas partes intentando saber de sus hijos sin éxito a pesar de haberles dicho ... "no vengas tarde, hijo".

- Por ellos y por toda una sociedad que tiende a desmadrarse de forma incontrolada, pensemos en exigir a quien corresponda que cuide de organizar, encauzar y, especialmente, controlar, toda esa vida social de nuestros jóvenes, cuyas ansias por explotar y vivir a tope su vida, les vienen provocadas por una desilusionada visión de su futuro y de la que algunos desalmados del mundo d ela noche intentan, como siempre, sacar provecho. Durante la madrugada del uno de noviembre de 2012 tres murieron y dos más están en situación de salud crítica.

 

- ¿A que esperamos para actuar de una vez para siempre y de un modo sensato para tomarnos en serio la redacción un modelo educativo consensuado y un futuro profesional y/o laboral garantizado para nuestros jóvenes?


@etarragó


Cinco de mis mejores refugios




 

19 comentarios:

  1. Ya no se trata de divertirse, sino de una forma de vida. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta tu definición, Susana, efectivamente, ya, por usual, es un modo de vida

      Eliminar
  2. Y qué podemos esperar, querido Enrique, en una sociedad que inocula el virus del consumismo, de la posesión, del disfrute sin poner la contrapartida del esfuerzo, de la cordura, de los ideales, de los principios...?

    Dónde están los valores humanos? Dónde quedan los estudios humanistas, esos que no idolatran el consumismo, el beneficio y el placer sensual? Dónde queda la lectura de los clásicos que tanto nos enseñan el arte de vivir y amar?

    Nuestros jovenes son el resultado de lo que les enseñamos con nuestro ejemplo. Si hay algo que no es bueno en ellos nos debemos preguntar qué hemos hecho mal. Si solo nos quejamos sin criticarnos a nosotros mismos, es que lo seguimos haciendo muy mal.

    Y no te doy más la charla, amigo mío!!! Qué no son horas!!! Jajajaja Pero una vez más, gracias por sacar estos temas ¡tan de actualidad!

    Un enorme abrazo, querido amigo!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, no debes preocuparte por las horas, querido Emilio, se escribe cuando se puede o se quiere y lo mismo cuando se lee.
      Estando de acuerdo contigo sobre las consecuencias que ya es la realidad que nos flagela, lo importante ya no será aquello de "que es lo que hicisteis con nosotros papá", ahora lo importante será saber qué es lo que se debe hacer para corregir o evitar nuevas incorrecciones en el modelo educativo de nuestros jóvenes. Un problema difícil de resolver, creo que la de nuestros hijos fue la última generación que les enseñaron a leer los clásicos.
      En fin, querido poeta enamorado, seguiremos dando apuntes para marcar temas de actualidad.
      Un abrazo muy fuerte.

      Eliminar
    2. Así es, querido Enrique. Lo más importante son las soluciones. Pero, qué soluciones podemos dar si no somos críticos, empezando por nosotros mismo??? Este es el gran problema que veo en nuestra sociedad: la complacencia con nuestros errores y vicios de los adultos. Más aún que los de los jóvenes. En fin...

      Acabo de leer tu comentario en mi blog, buen amigo. He agradecido tu generosidad, pero sobre todo he elegido tu altura ética y humana. Cómo he dicho visitar tus casa es motivo de alegría. Y hasta se convierte en refugios grato, y lugar para recuperar energías. Me fortalece e inspira visitarte, querido sabio!!! Tu sensibilidad y tú honestidad son memorables, y motivo de gozo para mí.

      Un enorme abrazo, querido amigo!!!

      Eliminar
    3. Gracias, querido Emilio, tu generosidad me abruma, pero me sube la autoestima hasta las nubes del cielo infinito.

      Eliminar
  3. Es todo cuestión de educación desde chiquititos porque para luego es tarde.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso es, Tracy, se lo acabo de escribir a nuestro Emilio al que veo muy preocupado con el asunto.

      Eliminar
  4. Uy lo peor es que las cosas están peor y no van mejorar. Te mando un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, eso es lo que me temo puede suceder si no está sucediendo ya, amiga Judit, que vaya todo a peor.
      Feliz viernes, escritora.

      Eliminar
  5. Creo que los jovenes estan criados con demasiados pañales y ahora, en estos tiempos duros, lo estan pasando muy chungo... Antes, nos criaron sin tantos miramientos y estabamos mas acostumbrados a echarnos "al pico y a la pala"...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bien contado, Ildefonso, "al pico y a la pala".
      Un abrazo de viernes.

      Eliminar
  6. En mi época de estudiante salí mucho y hasta altas horas. Estudiaba antes de bajar. Jamás fumé un porro, esnifé coca , ni cogí una borrachera. Mi lema era que tenía que ser consciente de todos mis actos. Esta actitud respondía a que mi padre siempre me decía que hagan lo que hagan los otros tú debes saber lo que tienes qué hacer.

    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo mismo puedo yo decir, querida Ilduara. No entiendo que nos ha pasado, ¿la evolución se está convirtiendo en involución?
      Ayer noche, hablando con los amigos del viernes la nuit, la mayoría hablaban de lo mismo, pero los había que, además, decían que nuestros padres pensaban de nosotros lo mismo que nosotros pensamos de los muy jóvenes de hoy, es decir, esa forma de pensar es cosa de viejos.
      Ya ves, ¿será así?
      Feliz noche.

      Eliminar
  7. Un relato de 2011, más o menos, que tuvo su importancia en una época determinada, y que puede que no la haya perdido. Si bien hoy las cosas pueden ser algo más "extremas"..., en algunos aspectos.
    El mundo es hoy el que es! Y con ello la vida! La crispación de hoy puede que no sea la de entonces.
    Cuando leo, oigo, comentarios como el presente, y si te fijas bien amigo Enrique, quienes te comentan suelen decantarse por el mismo signo que lo que se publica, ¡curioso esto!, yo me fijo en el día a día, sus vidas, de mis dos nietas. 12 y 19 años.
    Ayer mismo nos juntamos unas 50 personas a cenar, entre ellas las dos nietas, y no vi, ni suelo ver en ellas problemas de futuro alguno.
    Vi dos jóvenes sensatas, modernas como cualquiera, responsables, seguras en el ambiente familiar y social en el que viven, etc.
    No niego esos temores prescritos en general...
    Pero, cómo dice Tracy: "Es todo cuestión de educación desde chiquititos porque para luego es tarde."
    Y en eso estamos la familia. Y, cómo no, este aitite (abuelo) encantador... :))))))
    Gran abrazo. Tú sigue escribiendo. Un placer siempre compartir tus trabajos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Ernesto, como dice Tracy y como tú muy bien rematas, la educación es clave para el comportamiento de los jóvenes y de todas las personas en general.
      Gracias por tus siempre amables y certeros comentarios.
      Un abrazo

      Eliminar
  8. La juventud del desconcierto. La vuelta del rebelde sin causa. Un abrazo. Carlos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, eso creo, Carlos Augusto. El tiempo dirá.
      Feliz lunes

      Eliminar

Este blog comparte contenidos con otro de mis blogs a modo de copia de seguridad, el uno del otro, hasta el 24 de febrero de 2023

https://enriquetarragofreixes.wordpress.com/